A juicio del sindicato, se hace necesaria esta negociación en temas como su contenido, su impartición y la “aparente pero difusa” obligatoriedad de la misma, al tiempo que justificaron la apertura de este debate en “la marcada relevancia del tema y los conflictos que están surgiendo en torno al mismo”.

“El debate socio-educativo al que estamos asistiendo va más allá de idearios claves como la objetividad, neutralidad, respeto al pluralismo o defensa de una actitud crítica. Éstos están, o debieran estar, suficientemente integrados en la sociedad actual", aseguraron.

El sector autonómico de Enseñanza de CSI-CSIF insistió en que "las demandas sociales y educativas van necesariamente unidas, pero con criterios únicos, comunes, claros y objetivos”.

Asimismo, incidió en la “perentoria necesidad” de alcanzar un acuerdo consensuado, en el que estén “justificadas las acciones a tomar y que nos permita llegar a una situación cuanto menos clara, en la que toda la comunidad educativa sea escuchada”.

Por ello, insistió en el alcance de un acuerdo de todos los implicados en lo referente a esta materia, debidamente analizado, para lograr llegar a “una rápida conclusión que redunde en el beneficio de nuestro sistema educativo actual”.