Este hallazgo, publicado en la revista 'Science', podría presagiar un aumento del riesgo de estas dañinas tormentas costeras para las poblaciones costeras de todo el mundo.

Los ciclones tropicales son uno de los desastres naturales más devastadores y costosos en términos económicos. En la actualidad, casi un tercio de la población mundial reside en sus áreas de influencia.

Recientemente, se ha observado que estas tormentas se están volviendo cada vez más fuertes y se están produciendo en latitudes cada vez más altas con respecto al pasado. Si bien se cree que los efectos del cambio climático mediado por los humanos impulsan estos cambios, su impacto potencial en las áreas costeras sigue sin estar claro.

La comprensión de estas tendencias es fundamental para una mejor evaluación de la posible evolución de los ciclones tropicales costeros en el futuro. Shuai Wang y Ralf Toumi investigaron la actividad de los ciclones tropicales en todo el mundo en el periodo comprendido entre 1982 y 2018, y encontraron que, además de su migración hacia los polos, la actividad de los ciclones se ha estado acercando a la tierra firme a escala global.

Según estos hallazgos, la distancia entre el punto de máxima intensidad de cada tormenta y la tierra firme ha estado disminuyendo en aproximadamente 30 kilómetros por década.

Además, los autores afirman que la fracción de ciclones tropicales que alcanzan las regiones costeras -definidas como las áreas de costa comprendidas dentro de una distancia de 200 kilómetros respecto de la tierra firme- también ha estado aumentando década tras década.

Wang y Toumi desvelaron un cambio hacia el oeste en las trayectorias de los ciclones tropicales, cuya actividad se está desplazando hacia el oeste en las regiones de Pacífico occidental y oriental, e Índico norte y sur.