En un análisis sobre los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del cuarto trimestre, BBVA destaca que el empleo creció en el cuarto trimestre en 167.400 personas, pero que 815.600 ocupados trabajaron menos horas de las habituales por los ERTE o por paro parcial, 71.500 menos que en el tercer trimestre y un 17,8% el máximo alcanzado en el segundo trimestre.

BBVA señala que los servicios se mantuvieron a la cabeza de la recuperación, aunque con menor dinamismo del esperado.

Los archipiélagos se situaron a la cabeza en destrucción de empleo por el impacto de la crisis sanitaria en el turismo.

La contratación temporal fue la que impulsó la creación de empleo en el cuarto trimestre. La tasa de temporalidad se mantiene 1,5 puntos por debajo de la cifra del cuarto trimestre de 2019, en el 24,6%.

Por lo que respecta al desempleo, “el avance modesto de los activos favoreció la caída de la tasa de desempleo hasta el 16,1%”.

Las dificultades en la búsqueda de empleo, derivadas de las restricciones de movilidad, contribuyeron a que la población activa también disminuyera con fuerza en el balance anual y la tasa de paro media quedó en el 15,5%.