En el estudio han participado la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), la Federación Española de Cáncer de Mama (Fecma), la Asociación de Cáncer de Mama Metastásico (CMM), el Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (Geicam) y el Grupo Solti, con el patrocinio de Lilly y la oficina técnica de Ascendo Consulting.

Durante más de un año, expertos en Oncología Médica analizaron la situación actual del abordaje del cáncer de mama metastásico en España. Ahora, el estudio ya está a disposición de todos los interesados en modificar y mejorar la atención que reciben las pacientes con esta enfermedad, que se ha visto especialmente condicionada por la crisis sanitaria de la Covid-19.

El cáncer de mama metastásico (CMM) es una fase diferente del cáncer de mama en su estado inicial, que se caracteriza por su expansión fuera de la mama, alcanzando otras partes del cuerpo, que con frecuencia son los huesos, los pulmones, el hígado y/o el cerebro.

Se trata de una patología en la que se sigue investigando para aumentar la supervivencia de las personas afectadas. Es un primer paso para lograr convertirla en una situación crónica y esquivar la que, actualmente, constituye la primera causa de muerte en mujeres de entre 30 y 50 años en España. En la actualidad, se estima que 6.500 personas fallecen cada año en España por esta patología.

DIVERSIDAD TERRITORIAL

El estudio se realizó teniendo en cuenta la diversidad territorial. El presidente de SEOM, el doctor Álvaro Rodríguez-Lescure, subrayó que “el cáncer de mama metastásico es una enfermedad con manifestaciones clínicas muy variables que plantea grandes retos en investigación y en la práctica clínica”.

El grupo de trabajo estuvo formado por un Comité Asesor y un Panel de Expertos con representación de 12 comunidades autónomas analizadas. El Comité Asesor lo han integrado oncólogos médicos, representantes de pacientes y un representante de la Administración, con una visión de la administración central y regional. El Panel de Expertos lo formaron oncólogos médicos de 25 hospitales pertenecientes a 23 provincias y por representantes de las organizaciones de pacientes locales.

El resultado del estudio aborda aspectos muy diversos del manejo del CMM y de él se obtienen 37 conclusiones y recomendaciones que se dividen en varias áreas de actuación: recursos, proceso asistencial y la función de las asociaciones de pacientes. En su conjunto, invitan a reflexionar sobre la necesidad de un abordaje integral de la enfermedad.

REGISTRO DE CÁNCER

Uno de los puntos a mejorar son los registros de cáncer. Los existentes no recogen datos de recaídas, por lo que se desconoce la prevalencia real de enfermedades oncológicas en fases avanzadas o metastásicas. Se necesitan registros coordinados con recursos adecuados para la recogida de datos que reflejen las necesidades reales de cada entorno asistencial y, de esta forma, mejorar su planificación.

Otro aspecto destacable del manejo de la enfermedad es la necesidad de contemplar de una manera más explícita líneas de acción específicas en las Estrategias y Planes Oncológicos. Además, es importante fortalecer la implicación de los médicos de atención primaria, principalmente en el seguimiento de largas supervivientes y en el abordaje de las secuelas de la patología.