Gallardón, que participó en un encuentro interactivo con mayores de cuatro centros municipales, aseguró que las restricciones presupuestarias no han afectado a los servicios destinados a los ciudadanos que tienen más de 65 años. "Es necesario hacer ajustes, pero nunca a costa de los más vulnerables", declaró.

Según Gallardón, 50.000 mayores se benefician actualmente del programa de Ayuda a Domicilio, casi el doble que hace ocho años; y hay instalados 98.000 dispositivos de teleasistencia (en 2003 eran 15.000) que protegen a 113.000 usuarios.

"Estos datos suponen una cobertura del 18% de la población mayor de 65 años -la media nacional es del 4,4%- y que llega al 40% entre las personas de más de 80 años. Nuestro objetivo para los próximos cuatro años es extender la teleasistencia entre todos los mayores de 80 años y dotarla de programas de contenido sociosanitario", avanzó.

Gallardón, que repasó la política en materia de mayores llevada a cabo en sus ocho años al frente de la Alcaldía, habló también sobre los impuestos que pagan los mayores. Destacó que el Ayuntamiento ha rebajado este año un 9% el importe de la tasa de basuras y ha aumentado los supuestos de exención, que beneficiarán a 27.800 contribuyentes, de los que el 80% son pensionistas.

IBI SOCIAL

Respecto al IBI, Gallardón recordó que este tributo está regulado por una ley estatal que no contempla beneficios para colectivos. "Estamos reclamando", dijo, "la modificación de dicha norma para que se pueda implementar el IBI social, incluyendo bonificaciones de hasta el 50% para los colectivos con menos posibilidades económicas".

El regidor defendió el papel esencial que los mayores desempeñan en la sociedad, como demuestran los datos de que el 40% contribuye a la conciliación de la vida laboral de sus hijos cuidando a los nietos o realizando tareas domésticas; el 14% presta alguna ayuda a miembros de su propia generación, y el 25% de los 6.000 voluntarios por Madrid tiene más de 65 años.

Este apoyo, fundamental dijo, "desmiente la idea de que es un sector de población que se limita a demandar servicios". "Muy al contrario", agregó, "los mayores aportan un caudal de solidaridad del que de ninguna manera podemos prescindir".