En la Junta de Accionistas de la compañía, y en respuesta a un accionista, Brufau calificó de "hartazgo" la sensación que este tipo de documentos le producen. “Esta compañía trabaja mucho para su imagen, para crear una empresa responsable. No puede ser que se vea inmersa en debates mediáticos” que se vinculan, más bien a “protagonismos personales de cargos públicos que deberían ser más respetuosos”, dijo en alusión a Luis Berenguer.

Aludió, también, a las recientes declaraciones del presidente de la Comisión Nacional de la Competencia, quien dijo que “es complicado para los poderosos renunciar a sus privilegios, salvo si se les presiona”.

“Si ser poderosos es dar trabajo a 40.000 personas, lo somos”, contestó Brufau. “Dejemos la demagogia y que cada uno cumpla con sus responsabilidades. Si esta casa no cumple, que haya una penalización; pero si hace bien su trabajo, que se la respete”, concluyó.

Además, consideró que el ciudadano español debería ser consciente de que el producto que le llega tiene un “precio eficiente”, teniendo en cuenta que su carga fiscal es alta. Se da “un servicio de primer nivel”, defendió Brufau.