Según informó hoy la compañía alimentaria a la CNMV, Abengoa asume, con esta operación, una deuda neta de 31,6 millones de euros correspondientes a dicho 50% de la sociedad vendida.

Biocarburantes de Castilla y León fue constituida al 50% por ambas compañías en el año 2000 para el desarrollo de la actividad de biocombustibles a través de la planta de bioetanol de Babilafuente (Salamanca), en funcionamiento desde el año 2006.

Para Ebro Puleva la operación supone, tras la venta de su negocio azucarero a ABF, la salida total del negocio de los biocarburantes y la concentración de esfuerzos y recursos en los negocios marquistas que constituyen la base de su plan estratégico.

Por su parte, Abengoa adquiere con dicha operación la totalidad de la propiedad de la planta de bioetanol de Babilafuente.