Según informó este miércoles la Policía, los detenidos -tres hombres de entre 37 y 48 años y de nacionalidad española- irrumpieron encapuchados y provistos de armas en la garita de seguridad del conjunto residencial en la urbanización de Estepona.

Los delincuentes neutralizaron al guarda del complejo, a quien engrilletaron y encerraron en un cuarto tras propinarle una paliza. A continuación, irrumpieron en dos viviendas, una de ellas incluso con moradores en el interior, un matrimonio de origen belga que fue maniatado, mientras los asaltantes se apoderaban de los objetos de valor.

Los tres acusados, para los cuales el juez ha dictado el ingreso en prisión sin fianza, están acusados de los delitos de detención ilegal, tenencia ilícita de armas, lesiones graves, robo con violencia o intimidación, robo con fuerza y pertenencia a organización criminal.

RASTRO DE LAS TARJETAS

El arresto de estos ladrones se ha producido después de que las pesquisas de los agentes permitieran saber que algunas tarjetas de crédito sustraídas en los asaltos habían sido utilizadas en la localidad de San Pedro Alcántara, cerca de Marbella.

A partir de ese momento se intensificaron las gestiones de investigación que se prolongaron hasta el pasado mes de diciembre, que permitieron identificar, en primer lugar, a uno de los supuestos artífices de los robos. Este sospechoso resultó ser un vigilante de seguridad de la propia urbanización donde acontecieron los hechos. Posteriormente se identificó a sus dos compinches, que también eran vigilantes de seguridad.

Fruto de tres registros domiciliarios en las localidades malagueñas de Ojén, Coín y San Pedro Alcántara se intervinieron armas de fuego -reales y simuladas-, así como las prendas de vestir y los equipos de transmisión empleados en los asaltos.