El líder socialista expuso sus propuestas sobre óvenes ante estudiantes congregados en la Universidad Carlos III de Getafe, en Madrid, invitado por su rector, Gregorio Peces Barba, miembro del Comité de Notables que asesora a Rodríguez Zapatero en su camino a La Moncloa. El acto comenzó con un minuto de silencio en recuerdo del ex dicretor de la RAE Fernando Lázaro Carreter, fallecido la pasada madrugada, y que fue recordado por el candidato del PSOE como miembro del grupo que designó para dictaminar una reforma de los medios públicos de comunicación. Después de su intervención, se sometió a las preguntas de los asistentes, uno de los cuales le preguntó por las encuestas, justo después de que se conociera la del CIS, que otorga 176 escaños al PP y 131 al PSOE.

Pese a los siete puntos de diferencia en estimación de voto a favor del PP reflejados en este sondeo, Rodríguez Zapatero resaltó que, si se mira "lo que no se puede cocinar", es decir, la intención de voto directo más simpatía, los socialistas estarían un punto por delante.

Se trata, n su opinión, de unos datos "previsibles" que demuestran, en todo caso, que el PSOE recupera un terreno perdido por el PP, cuyo candidato, Mariano Rajoy, "se deshincha un poco". Esta conclusión se corresponde, aseguró, con un análisis en perspectiva del conjunto de la legislatura, con "muchos errores y problemas sin resolver" por parte del Gobierno.

En contra de los datos del CIS, Rodríguez Zapatero explicó que las encuestas internas del PSOE "nos dicen que estamos muy cerca, casi en empate técnico, pra poder ganar las elecciones", y se mostró convencido de que la clave del resultado será la apuesta por el cambio que hagan los ciudadanos. Con "toda modestia y humildad", alertó, para lograr ese cambio "hay que respaldar al PSOE".

Hay que hacerlo, argumentó, porque el PSOE es el único partido con posibilidades de gobernar si no lo hace el PP, y él sólo está dispuesto a formar gabinete si obtiene más votos, rechazando todo "pacto extraño" para llegar al Ejecutivo.

Rodríguez Zapatero advirtió a ls electores progresistas de que el PP y "sus amigos poderosos" tratarán de que cale en los próximos días la idea de que el resultado ya está cantado, conscientes de que una mayoría social quiere ese cambio y, por tanto, la permanencia de los populares en el poder pasa por desincentivar a ese colectivo haciéndole creer que el cambio es difícil.

Sin embargo, recordó que sólo las urnas arrojan el dictamen final, y que en las elecciones "no pasa lo que la gente cree que va a pasar, sino lo que quiere que ase" y, por eso, los socialistas confían en esa mayoría que, según los sondeos, desea un cambio de Gobierno aunque piense que el PP ganará las elecciones.

En todo caso, y ante un auditorio formado sobre todo por universitarios, Rodríguez Zapatero volvió a pedir el voto de los más jóvenes, a los que propuso "una alianza generacional" similar a la forjada entre el PSOE y la nueva generación que votó por primera vez en 1982 para consolidar la democracia en España, en un momento en que el país estaba "cogdo con alfileres".

"EL GOBIERNO MAS AUSTERO DE LA DEMOCRACIA"

Ahora, les explicó, es necesario "renovar" la democracia, profundizar en los espacios de libertad, reforzar los servicios públicos, fomentar los valores de diálogo, tolerancia y respeto por los que se luchó en aquel momento, cuando los jóvenes de entonces "no nos quedamos en casa, tomamos la responsabilidad de decidir".

Son los jóvenes, reiteró, los que pueden y deben "ganar estas elecciones" para permitir "un cambio tranquilo" de rubo, con garantía de "buen gobierno", que preserve la transparencia de su gestión, el interés general, el diálogo permanente, "y que diga siempre la verdad, que nunca mienta". Se comprometió, por ello, a "felicitar" las comisiones de investigación en el Parlamento, la primera de las cuales será para conocer la verdad sobre la información que tenía España acerca de las armas de destrucción masiva en Iraq.

Después de que el PP haya recuperado la corrupción de la época socialista como arma contra el lídersocialista, Rodríguez Zapatero aseguró también, en respuesta a una pregunta, que su gobierno será "el más austero de la democracia" en gasto corriente de la Administración y en recorte de toda partida innecesaria, porque cada euro procedente de los ciudadanos debe ser gestionado "con la máxima precaución".

Reiteró, en este sentido, que la defensa de la estabilidad presupuestaria, no como dogma pero sí como principio a preservar a lo largo de un ciclo económico, es compatible con un incremento del gast social hasta llegar al 40 por ciento del PIB, siempre que se reoriente la política del Ejecutivo para dar prioridad a ciertas partidas sobre otras y se garantice la lucha contra el fraude.

Ante los universitarios, reiteró su compromiso de derogar la Ley de Universidades y la de Calidad de la Educación, a lograr que en 2010 el 85 por ciento de los mayores de 22 años tenga estudios postobligatorios, a llegar al cuarenta por ciento de alumnos becados como la media de la Unión Europea, y a unificar Educaión y Ciencia y Tecnología en un solo ministerio como muestra del objetivo de reforzar la relación entre la Universidad y la investigación, mejorando además las condiciones laborales y retributivas de los investigadores.

También recordó su intención de subir el Salario Mínimo Interprofesional hasta los 600 euros al mes, a formentar el acceso a la vivienda de los jóvenes, una materia por la que el PP "merecería perder las elecciones", de lograr la plena igualdad entre hombres y mujeres en todos los ámbtos, de no poner más límite que los éticos a la investigación con células madre, de equiparar las parejas homosexuales a los matrimonios, y de garantizar el laicismo consagrado en la Constitución.

Después de que Rodríguez Zapatero señalara a José Bono y a Miguel Sebastián como posibles ministros de su Gobierno, uno de los estudiantes le preguntó quién estaría al cargo de la cartera de Educación y Cultura. Sin dar nombres, expuso "algún dato a modo de pista" del perfil que ya ha pensado y en el que podían encajar, precisó, varias personas.

Sin especificar si será hombre o mujer, aseguró que estará al frente de una cátedra o como titular de algún departamento en "una universidad pública madrileña", lo que excluye, en principio, a la secretaria socialista de Educación y Cultura del PSOE, Carme Chacón, profesora de la Autónoma de Barcelona, pero que encajaría, por ejemplo, con la número dos de la candidatura al Congreso de los Diputados por Madrid, Mercedes Cabrera Calvo-Sotelo, catedrática en la Carls III, o el propio rector y anfitrión de este acto, Gregorio Peces-Barba.