Madrid. Detenido de nuevo el secuestrador que se fugó de prisión falsificando un fax judicial

- Estaba escondido bajo un sofá que había preparado para ocultarse en su domicilio en San Lorenzo de El Escorial

- Desde su salida de prisión el 30 de diciembre, se hacía pasar por catedrático de la Universidad de Bolonia

MADRID
SERVIMEDIA

La Policía Nacional detuvo ayer, jueves, en San Lorenzo de El Escorial a José Carlos Serna, de 57 años, tras fugarse por segunda vez de prisión el pasado 30 de diciembre falsificando un fax supuestamente remitido por la Audiencia Provincial de Madrid, según informó este viernes la Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil.

Ésta es la tercera vez que se detiene a este delincuente cabecilla de la red que secuestró en 2008 a un empresario español que fue liberado 15 días después de su cautiverio en el Algarve portugués. Serna había utilizado el mismo método para evadirse del Centro Penitenciario de Valdemoro en octubre de 2010.

Serna fue detenido ayer en su domicilio de San Lorenzo de El Escorial, una vivienda completamente enrejada y de imposible acceso, en la cuál pensaba encontrarse seguro. La casa había sido días atrás registrada por la policía y en ella se había detenido a su mujer, autora de la falsificación documental y compinche en su huida de prisión, por lo que Serna pensaba que los agentes no volverían al lugar.

Sin embargo, los investigadores del Grupo de Secuestros y Extorsiones de la UDEV Central, de la Comisaría General de Policía Judicial, le localizaron ayer en la vivienda, escondido bajo un sofá que tenía preparado para ocultarse. Los policías tuvieron que acceder al inmueble por el tragaluz del tejado.

El pasado 30 de diciembre, cuando estaba a punto de celebrarse el juicio oral por el secuestro por el que fue detenido, el Juzgado de Instrucción de Guardia de Arganda del Rey recibió a última hora de la mañana un fax remitido supuestamente por la Sección 23 de la Audiencia Provincial de Madrid que acordaba la libertad del interno. Además, una mujer que se identificaba como funcionaria judicial de la citada Sección reiteraba el comunicado del escrito.

El Juzgado de Arganda revisó las formalidades del fax e intentó contactar con la Sección 23 de la Audiencia, pero nadie contestaba. Al recibir una segunda llamada de la falsa funcionaria, el juzgado extendió el auto de libertad. Por segunda vez, y utilizando el mismo procedimiento, Serna salía de prisión en un taxi que le esperaba.

Las investigaciones policiales apuntaron a su mujer, Gema María S.R, como autora de la falsificación del documento público. Desde un locutorio de Alcorcón, con su propio ordenador, simuló un teléfono de la Audiencia Provincial, se hizo pasar por funcionaria y remitió el fax que facilitó la huida a su marido.

Gema fue detenida el 3 de marzo y se decretó su prisión provisional. En el registro de su vivienda se encontraron resguardos de ingresos que permitieron ir descubriendo la red de apoyos que Serna había tejido para permanecer oculto y seguro de la investigación policial.

DE SECUESTRADOR A CATEDRÁTICO

Desde su salida de prisión, el 30 de diciembre, Serna había adoptado medidas impensables en delincuencia común, según la policía, ya que había alquilado habitaciones en pisos de Madrid y una casa en Boadilla; había contratado conductores, y tenía diversos terminales telefónicos y cambiaba continuamente sus tarjetas.

Disponía, además, de una red de contactos a los que identificaba con abreviaturas y con los que contactaba por mail para darles instrucciones. Se hacía pasar por catedrático de Economía de la Universidad italiana de Bolonia y decía que venía a contactar con profesores de las universidades madrileñas.

Según declaración de sus conductores, éstos creyeron su historia y en más de una ocasión le llevaron a la Universidad Complutense y a la Autónoma donde pensaban se citaba con otros profesores. A pesar de la extrañeza, él sostenía que adoptaba estas medidas para evitar ser víctima del espionaje industrial.

La investigación policial fue estrechando el círculo sobre el secuestrador fugado, y se establecieron dispositivos continuos de vigilancia durante diez días en varios lugares en los que había estado, pero a los que nunca volvió. Finalmente, se le ubicó en su domicilio familiar donde ayer fue arrestado, y ha ingresado nuevamente en prisión.

(SERVIMEDIA)
01 Abr 2011
NLV/jrv