En un comunicado, esta organización compuesta por varias empresas como Adigital, Manpower, Cuatrecasas o Garrigues, ha publicado un estudio sobre la compensación de gastos y la dotación del equipamiento necesario para los trabajadores que desempeñen sus tareas a distancia que pretende servir de guía en la negociación colectiva de los convenios en la que se tienen que dirimir de qué forma se compensan los gastos asociados al teletrabajo.

El Observatorio ha realizado un análisis de los convenios sectoriales y de empresas que contienen menciones específicas la teletrabajo y concluye que la mayor parte de las empresas apuestan por establecer una compensación lineal en el salario de los teletrabajadores. A juicio del OTaD, esa opción puede generar diferencias “notables” entre trabajadores presenciales y remotos por las implicaciones fiscales y por la transmisión de la propiedad de los medios de producción a los trabajadores.

En su lugar, propone que las compensaciones y dotaciones se adapten a la intensidad y frecuencia del trabajo y oscilen en una horquilla con un mínimo fijado por el coste de vida medio del lugar donde se ejerza el teletrabajo y un máximo establecido por el coste medio del mismo trabajador durante los tres años previos al trabajo presencial.

Para los casos en los que los trabajadores a distancia ejerzan desde sus hogares particulares, el Observatorio propone realizar una dotación fija al inicio del desempeño en remoto que se complementará con una aportación variable según el tiempo que se ejerza el teletrabajo. Así, pone de ejemplo dotar al inicio del ordenador, la silla ergonómica y 50 euros para gastos mensuales.

En los casos de quienes teletrabajen fuera de su domicilio como puede ser en lugares de espacios para trabajar compartidos como ‘coworking’, recomienda una aportación variable adaptada al tamaño de la empresa y al coste del metro cuadrado del lugar donde se encuentre la oficina complementaria o el espacio de trabajo compartido.

También, propone buscar “fórmulas creativas” para articular la dotación de equipamiento y la compensación de gastos como, por ejemplo, la creación de vales compensatorios similares a los de comida o de guardería, lo que puede “facilitar” la tramitación administrativa interna en las empresas y “garantiza que los empleados acceden a bienes y servicios de calidad que garantizan su salud y seguridad”.