Según dijo el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, durante la inauguración del nuevo puente, se rompe así la profecía de quienes, como antes habían hecho con la M-30, calificaron el proyecto de "sueño que no conseguiríamos. Pues bien, ese sueño ya es realidad", aseguró.

El puente, que ha costado 13,6 millones a las arcas municipales, se divide en dos brazos que suman 278 metros y confluyen sobre una plaza mirador ubicada en el propio parque de la Arganzuela, en la que se cruzan distintos caminos.

Gallardón aprovechó para reiterar que en apenas tres semanas, el 15 de abril, estará finalizado todo el proyecto Madrid-Río, con más de 900.000 metros cuadrados devueltos a los ciudadanos, 33.000 nuevos árboles y 470.000 arbustos, más de 10 kilómetros de paseos peatonales y ciclistas, fuentes ornamentales, instalaciones deportivas y 33 pasos para "coser" la frontera que constituía la M-30, explicó.

Aseguró que a través de Madrid-Río se ha dotado a la ciudad de "un nuevo paisaje", y dijo que una de las claves para conseguir ese nuevo paisaje accesible y sin barreras ha sido el sistema de puentes y pasarelas, entre los que se encuentra el inaugurado hoy, que facilita el paso entre ambas orillas del río y que ha hecho que ningún vecino de la zona tenga a más de 300 metros un sitio por donde cruzar el Manzanares.

DENUNCIA DE IU

Por su parte, IU, coincidiendo con la apertura al público del nuevo Puente de la Arganzuela, quiso denunciar el estado de abandono en que se encuentran otros puentes que cruzan el Manzanares, como los que hay a su paso por el distrito de Villaverde.

"Acaso no gocen de la misma fama ni el alcalde se retrate sobre ellos para pasar a la posteridad, pero existen. Otros puentes, otros diseños sobre el mismo río", denuncia IU, que, irónicamente, no descarta que la falta de parte del vallado en estos puentes en mal estado "sea cosa del diseño minimalista, mas, a primera vista, lejos de ser creación de algún insigne artista se antoja absoluta desidia por parte del Ayuntamiento de Madrid y consecuente riesgo para los transeúntes".

"Fuera de Madrid Río hay otro río como fuera de Cibeles hay otra ciudad", opina el portavoz de IU y candidato a la Alcaldía de Madrid, Ángel Pérez, quien reitera que "hemos estado en contra del proyecto Madrid-Río porque las prioridades para IU son otras".

"Entendemos, y así lo dijimos, que una vez hecha la obra de la M-30 es obvio que no se podía dejar la superficie como estaba, pero también entendemos que con ese enorme volumen de gasto las prioridades de la ciudad, de sus gentes y sus barrios son otras", dijo Pérez, para quien el estado del puente de Villaverde "no deja de ser un ejemplo elocuente de las dos ciudades que conviven en Madrid".