La sentencia condena a Carlos Emilio Cristóbal Martínez, María Arantxa Garballo y Aitor Fresneda Gerrikabeitia por los delitos de pertenencia a banda armada, depósito de armas, tnencia de explosivos, falsificación de matrículas y conspiración para el asesinato.

Según la resolución judicial, el dirigente de ETA José Javier Arizcuren Ruiz ordenó a los tres condenados que se instalaran en Galicia y recogieran datos sobre posibles objetivos de la banda terrorista, entre los que estaba Fraga.

Tras recoger varios datos sobre la residencia oficial del presidente de la Xunta de Galicia, los restaurantes por él frecuentados, los coches que utilizaba y los trayectos, decidieron atntar contra él. "La acción estaba prevista para finales de septiembre o principios de octubre" de 1996, asegura la sentencia.

Unos días antes de esta fecha, efectivos de la Guardia Civil detectaron la presencia del "comando Galicia" y detuvieron a sus tres miembros, además de incautarse de un arsenal de armas y explosivos que iban a ser utilizados en el atentado.

Esta condena es la más importante contra el citado "comando" de la banda terrorista, si bien, además de los condenados, algunos de sus olaboradores aún no han sido detenidos.