Según los datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea recogidos por Servimedia, con esta subida el diésel es ya un 9% más costoso que a principios de mayo, cuando tocó suelo en la pandemia, y la gasolina un 10,5% más cara que entonces. Ese mínimo llegó tras abaratarse ambos alrededor de un 18% desde finales de febrero, cuando empezaron a generalizarse los casos de coronavirus en Europa.

Sin embargo, la gasolina y el diésel siguen siendo más baratos que a inicios de 2020 tras esta racha de subidas. La primera un 10,3% y el segundo un 14,3%.

El precio de la gasolina esta semana en España es de 1,185 euros por litro, lo que supone un ascenso del 0,77% con respecto a los 1,176 euros de hace una semana. En el último mes y medio su precio ha subido un 3,8%.

Por su parte, el del gasoil es de 1,069 euros por litro, un 1,04% más alto que los 1,058 euros de la referencia anterior. En su caso, acumula un incremento del 5,4% en las últimas seis semanas.

Con los precios de la última semana, llenar un depósito de 55 litros de gasolina cuesta 65,18 euros, 50 céntimos más que hace una semana, mientras que un depósito de un vehículo de gasóleo conlleva un gasto de 58,80 euros, 61 céntimos más que la semana anterior.

El importe medio de ambos carburantes en España sigue por debajo tanto de la media de la Unión Europea como de la zona euro. En la última semana, en la UE-27 el precio de la gasolina se situó en 1,281 euros por litro, mientras que el del diésel lo hizo en 1,159 euros.

Asimismo, en la zona euro el precio de venta al público del litro de gasolina se fijó en 1,325 euros por litro y el del gasoil en 1,179 euros.