Según los datos provisionales publicados este martes por el Banco de España, el cómputo total de los créditos considerados dudosos -con, al menos, tres cuotas consecutivas sin pagar- se situó en 55.756 millones, por debajo de los 55.933 millones que alcanzaba el mes previo.

Su mejora tiene lugar en términos absolutos, ya que la cifra cae un 0,31%, como en términos relativos, al ser menor su peso frente al stock total financiado, a pesar de la crisis ocasionada por las restricciones aplicadas para contener la pandemia.

Los avales del ICO y otras medidas aprobadas por el Gobierno para ayudar a empresas, autónomos y familias a encarar el revés económico estarían detrás de la buena evolución de los impagos y han contribuido a que la financiación crezca.

El saldo financiado se situó en octubre por encima de los 1,22 billones de euros, con un incremento del 2,40% interanual, aunque cae ya un testimonial 0,07% respecto al mes previo de septiembre.

Por tipo de entidades, en la banca la morosidad cayó al 4,49%, desde el 4,51% de septiembre y el 5,08% de octubre del pasado año.

Sin embargo, se aprecia un repunte en el crédito dispuesto por los establecimientos financieros de crédito o más vinculado a la financiación al consumo, cuya morosidad repuntó en el último mes del 6,59% al 6,62%.

A pesar de que los impagos continuaron a raya, las entidades han acelerado el acopio de provisiones y en octubre tenían acumuladas dotaciones por valor de 102.894 millones de euros, 38.798 millones de ellos ligados a créditos. Su cifra ha aumentado un 7,48% en la comparativa interanual, frente a los 97.736 millones acumulados en octubre del pasado año.