Esa tendencia alcista se recoge en los informes anuales elaborados por el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (Insst), dependiente del Ministerio de Trabajo y Economía Social.

El último informe con datos consolidados corresponde a 2019. Ese estudio, recogido por Servimedia, indica que ese año hubo 77.496 siniestros laborales de tráfico, lo que supone un 11,91% de los accidentes de trabajo con baja. Se trata de la cifra más elevada desde 2008, cuando se contabilizaron 81.840 accidentes laborales de tráfico. El dato más bajo de la serie histórica, que comienza en 2007, es de 2013 (52.129 siniestros),

En 2007 se contabilizaron 87.038 accidentes laborales de tráfico (un 8,52% del total de los accidentes de trabajo con baja), cifra que fue descendiendo paulatinamente en los siguientes años: 81.840 en 2008 (9,14%), 68.833 en 2009 (9,88%), 65.446 en 2010 (10,13%), 58.938 en 2011 (10,14%), 52.411 en 2012 (11,12%) y 52.129 en 2013 (11,14%).

Sin embargo, en los últimos seis años se ha producido una tendencia alcista ininterrumpida, con 54.416 accidentes laborales de tráfico en 2014 (11,08%), 58.842 en 2015 (11,12%), 64.737 en 2016 (11,43%), 69.108 en 2017 (11,58%), 71.886 en 2018 (11,64%) y 77.496 en 2019 (11,91%). Por tanto, el año pasado se produjeron más siniestros de ese tipo desde que en 2008 estallara la crisis económica, con la particularidad de que se trata de la tasa más alta de la serie histórica en relación al porcentaje total de accidentes laborales.

Además, conforme aumenta la gravedad del accidente laboral se incrementa la influencia del tráfico, que representa un 11,8% de los siniestros leves; un 21,8% de los graves y un 32,4% de los mortales.

España registró el año pasado 232 accidentes laborales mortales por tráfico de empleados que iban en un vehículo de casa al trabajo o viceversa (denominados 'in itinere') o durante la jornada laboral ('en misión'), lo que supone uno cada 1,5 días y la segunda cifra más alta desde 2011, sólo por detrás de los 260 de 2018.

Por otro lado, un total de 55.312 accidentes laborales de tráfico contabilizados el año pasado fueron ‘in itinere’, es decir, de casa al trabajo y viceversa (71,4%), y 22.184 sucedieron durante el horario laboral (28,6%). Esto significa que cada día se producen 212 accidentes laborales de tráfico.

'EN MISIÓN'

El perfil de un trabajador fallecido por un accidente laboral de tráfico durante la jornada laboral es el de un hombre (81%), que conducía un vehículo (83,7%) y con una edad media de 37,8 años (por 41,7 años de los trabajadores que sufrieron un accidente de trabajo con baja sin ser de tráfico).

Conductores y operadores de maquinaria móvil conforman la ocupación laboral con mayor porcentaje de fallecidos en los accidentes mortales de tráfico dentro de la jornada de trabajo (38,6%), más de la mitad tenían un contrato indefinido (52,9%) y la mayoría formaban parte del sector servicios (84,8%).

Por lo que respecta al tipo de actividad, las empresas dedicadas a tareas postales son las más afectadas por los accidentes de tráfico dentro del horario laboral (sean o no mortales), con 1.655,8 siniestros por cada 100.000 trabajadores afiliados a la Seguridad Social, seguidas de las de transporte terrestre y por tubería (564,5) y los servicios de comidas y bebidas (367,8).

'IN ITINERE'

En cuanto a los accidentes mortales ‘in itinere’, predominan los hombres (53,0%), conductores (78,5%), con una media de 38,2 años, con contrato indefinido (58,1%), trabajador de restauración y comercio (18,3%), y del sector servicios (79,0%).

Los trabajadores de actividades relacionadas con el empleo tienen el mayor índice de incidencia de accidentes de tráfico laborales 'in itinere' (905,0 siniestros por cada 100.000 afiliados a la Seguridad Social), por delante de las de seguridad e investigación (533,3) y servicios de alojamiento (510,0).