Los actores de la violencia sexual en menores son en un 98% de los casos, hombres que perpetran el abuso (35%) en el hogar de la niña y en un 31% en su propia casa, según el estudio basado en 400 sentencias de 2010 a 2019.

El lugar donde el niño o niña realiza sus actividades habituales, la escuela, lugares a los que acude para realizar actividades extraescolares deportivas, lúdicas o similares, supone el 12,84% de los casos. Las agresiones en lugares poco transitados sólo representan un 8,28%.

Solamente un 25 % de los casos la denuncia se interpone en el mismo día en que se produce el atentado contra la indemnidad sexual.

En el 43,12% se denuncia dentro del mes siguiente a que suceda el primer episodio de violencia sexual, sea éste el único o se produzca de forma reiterada o continuada y en un porcentaje del 31,31% la denuncia se formula cuando ha transcurrido más de un año.

Las madres son porcentualmente las personas que en mayor medida denuncian la violencia sexual, lo hacen en el 51,24% de los casos analizados, seguidas de las propias víctimas, en un 18%.

Las denuncias desde centros educativos, servicios sociales o sanitarios y centros de acogida sólo suponen un 4,24%, lo que denota las carencias en cuanto a formación de profesionales e instrumentos, así como de protocolos para la detección de las situaciones de violencia sexual que puedan estar sufriendo los y las menores.

Casi el 76% de las denuncias analizadas son condenatorias y en la mayoría (64%) no se trata de un hecho aislado.

La delegada del Gobierno contra la violencia de género, Victoria Rosell, destacó que la violencia sexual que sufren los menores "está oculta y silenciada"

En este sentido, la presidenta de la Asociación de Mujeres Juristas Themis, María Ángeles Jaime de Pablo, se refirió a la "inpunidad histórica" de estos delitos porque muchas víctimas sienten miedo, vergüenza y temen no ser creídas.