En concreto, el informe calcula que, al cierre de este año, el crecimiento del consumo de las marcas de fabricantes sea del 14,7%, algo superior al de las marcas blancas, que sitúa en el 4,3%. Esta ligera ventaja, explica, “se debe al impulso inicial que supusieron las ventas en unos momentos de comportamiento de compra de acumulación y atípicos por las exigencias del confinamiento estricto y por el aumento de la compra online”.

Sin embargo, el profesor de EAE Business School y autor del estudio, Pablo Contreras, apuntó que ya en 2021 el crecimiento estará protagonizado de nuevo por las marcas blancas, “continuando con la tendencia de los últimos años y acentuada por una necesidad de optimizar presupuestos de compra, tal y como ocurrió en la anterior crisis económica”.

Asimismo, el documento resalta la mayor venta en 2020 a través del canal online y los formatos de compra de proximidad con especial protagonismo de las cadenas regionales. En concreto, señala que el canal online aumentó sus cestas de la compra en el periodo enero-agosto 2020 en 3,8 millones más, con un aumento de cuota de 0,7 puntos y anticipando su crecimiento esperado en tres años, por lo que Contreras subrayó que “las enseñas de surtido corto (Mercadona, Dia, Aldi y Lidl, principalmente) deberán adaptarse a esta realidad y, si quieren seguir vendiendo online los mismos productos que en canal físico”.

Por otra parte, el estudio destaca que, desde el confinamiento, el número de cestas de la compra ha bajado en un 4%, el número de visitas a los puntos de venta ha bajado en un 3,3%, pero se hacen más compras del tipo “despensa”, más pensadas y de mayor volumen. En este sentido, el estudio señala que antes del confinamiento las compras de gran envergadura suponían el 25,1%, mientras que después suponen el 29,2%. “Esto favorecerá una compra más meditada y con mayor atención al precio en la que la marca blanca podrá jugar un papel cada vez más importante”, explicó Contreras.

Por otra parte, el estudio, basado en 1.000 encuestas, concluye que los productos de higiene del hogar son los que recogen mayor preferencia en MDD, con un 62,1% de encuestados, seguidos de helados y ultracongelados con un 51,6%, lácteos, yogures y postres con un 45,4% de consumidores.

En cambio, las categorías más “marquistas” son agua, bebidas y refrescos, con sólo un 23,9% para las MDD; los productos de higiene personal, con un 30,7%, y los chocolates y dulces, con un 33,5%, estando la media general de preferencia de marca de distribución en torno al 41,6%. Además, los hogares con mayor nivel de renta son los que tienen menos propensión a la MDD.

En España, según el informe, las enseñas de surtido corto con mayor presencia de Marcas de la Distribución son Mercadona, Día y Aldi, que suman el 36,5% del total de la distribución del minorista de gran consumo. Sin embargo, las enseñas que tienen una mayor cuota de mercado son Mercadona con un 27,7%, seguido de Carrefour, con un 8,6%, y Lidl, con un 6,3%.

Por otro lado, el estudio señala que en 2019 la diferencia de precios de promedio entre la MDF y la MDD fue de casi un 40% más barata para la MDD.

Por último, recoge que Suiza, España y Reino Unido son los países que lideran la presencia de las marcas blancas en sus respectivos mercados, tanto en volumen, como en valor. En concreto, Suiza y España lideran la cuota de mercado en volumen de la MDD en Europa, suponiendo casi el 50% del volumen de producto de gran consumo envasado vendido en dichos países. Le siguen Reino Unido, Bélgica, Portugal, Alemania y Austria, países que superan el 40%, mientras que Italia es el país en el que la marca de distribución tiene menos presencia de los analizados.

A este respecto, el informe apunta que la MDD en España se comercializa a un precio que es el 78,2% de la media del total de productos de consumo envasados, por lo que ocupa un lugar intermedio en el contexto europeo, mientras que en Países Bajos las MDD se venden a un precio medio del 90% sobre el precio promedio del mercado, un nivel muy similar al del Reino Unido.