El Ejecutivo respondía, en concreto, a una pregunta planteada por el diputado de Junts per Catalunya (JxC) Genís Boadella.

En su consulta, este parlamentario se refería al hecho de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, adquirió en su última investidura el “compromiso” con el País Vasco de “promover la representación internacional de Euskadi en el ámbito deportivo y cultural explorando las herramientas que posibiliten el cumplimiento del objetivo, con seguridad jurídica y en coordinación y colaboración con los agentes implicados”.

En este sentido, Boadella preguntaba al Gabinete de Sánchez si se plantea “este mismo tipo de reconocimiento internacional para promover la representación internacional de Cataluña en el ámbito deportivo y cultural”.

“CON SEGURIDAD JURÍDICA”

El Gobierno responde al respecto que “está dispuesto a abordar la posibilidad de estudiar la apertura de cauces para promover la representación internacional de Cataluña, y del resto de comunidades autónomas, en el ámbito deportivo y cultural, con seguridad jurídica, de acuerdo con la jurisprudencia aplicable, y en coordinación y colaboración con los agentes implicados”.

La promoción de selecciones deportivas distintas de la española ha sido una de las pretensiones de los nacionalistas de distintas comunidades desde la restauración de la democracia en 1978. Así ha sucedido en el País Vasco y Cataluña, donde partidos como PNV y CiU han venido planteando esta cuestión en sucesivas etapas.

En el caso catalán, la Unió Catalana de Federacions Esportives (UFEC), constituida en 1933, fue refundada en 1985 por la Generalitat, entonces presidida por Jordi Pujol. Posteriormente, esta materia ha seguido siendo impulsada por otros responsables de esta comunidad autónoma, como Carles Puigdemont.