En declaraciones a TVE recogidas por Servimedia mostró su discrepancia con la decisión de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, de confinar la Comunidad de Madrid solo durante el puente de Todos los Santos y el siguiente, coincidiendo con la festividad de La Almudena, y dijo que “lo ideal sería ofrecer a los ciudadanos, certidumbre y continuidad en las medidas”.

Afirmó que los cierres perimetrales, junto con las medidas de la Consejería de Sanidad basadas en actuar en las zonas básicas de salud, “están funcionado”, por lo que, añadió, “seria positivo que esos cierres se extendieran hasta finales de noviembre”.

Explicó que, de ser presidente, “no habría decidido lo mismo” que Ayuso a la hora de cerrar perimetralmente la región y “habría solicitado antes el estado de alarma”.

Asimismo, indicó que el cierre durante este puente, además de reducir, respecto al año pasado, un 50% la movilidad en la Comunidad de Madrid, “ha sido un balón de oxígeno” para sectores como la restauración, los alojamientos rurales o la industria textil que ha crecido entre el 20 y el 30% respecto a la anterior semana.

Se mostró partidario de poner en marcha ahora medidas “contundentes” con el objetivo de “evitar que nos encierren en Navidades” y criticó que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no tenga en marcha, en su opinión, una “estrategia nacional” ante la pandemia.

Por otro, lado, consideró “lógicas” sus discrepancias con Ayuso pero manifestó que “tenemos más puntos de acuerdo” que diferencias. Tras exponer que forma parte de un Gobierno de coalición no de un “ejército”, destacó que “no reniego de la discrepancia y de decir lo que pienso” en cada asunto.