Sector financiero

Botín dice que la solvencia, rating y coste de riesgo del Santander “debería” permitirle pagar dividendo y abre la puerta a recomprar acciones

MADRID
SERVIMEDIA

La presidenta del Santander, Ana Botín, defendió este martes que la solvencia del Santander, su calificación crediticia “de máximo nivel” y un diferencial de CDS “muy por debajo de los niveles de crisis anteriores” y de “los más bajos entre sus pares” debería situar al grupo “en posición de pagar dividendos”.

La banquera realizó esta defensa durante la Junta extraordinaria de accionista que hoy celebra el banco para aprobar el pago de un dividendo complementario de 0,10 euros en acciones con cargo al ejercicio de 2019 y otro igual, pagadero en efectivo el próximo año, con cargo a 2020 y siempre que así lo permita el Banco Central Europeo (BCE).

Según glosó, el banco ha sido capaz de generar 33 puntos básicos de capital en el año pese a la crisis, subiendo así el ratio de solvencia de máxima categoría CET1 al 11,98%, y prevé además cerrar el año “en la parte alta” de la banda fijada como objetivo del 11-12%, superando los mínimos regulatorios en todos los casos.

Botín explicó que situar la solvencia CET1 en la parte alta de su objetivo dará al banco “mayor flexibilidad” para gestionar el capital y la forma como remunera al inversor, “incluyendo dividendos en efectivo o recompras de acciones”.

“Seguimos acumulando capital sin sacrificar crecimiento, ni la rentabilidad a largo plazo, ni la retribución a nuestros accionistas”, reivindicó, indicando que se han reservado 19 puntos básicos de capital para el pago de dividendos en efectivo con cargo al ejercicio 2020 si lo permite el regulador.

En cuanto al rating subrayó que el banco no solo tiene una de las mejores notas de la banca, sino que además algunas agencias de calificación de solvencia le otorgan un rating mejor al del propio Reino de España; y sobre el perfil de riesgo o diferencial de CDS apuntó que es “de los más bajos entre sus pares, “lo que demuestra la confianza de los inversores institucionales y del mercado en nuestra fortaleza de balance y capital”.

“Todo esto debería situarnos en posición para pagar dividendos”, manifestó, subrayando además la “importancia” de los dividendos para los accionistas y como factor para disciplinar la propia gestión de las empresas. Según dijo, el reparto de beneficios “el mejor exponente de la disciplina financiera y su recurrencia aporta confianza y estabilidad a los inversores”.

La banquera resumió que la propuesta doble de entrega de dividendos se basa en dicha “sólida posición de capital”, la “fortaleza de balance” y “la resiliencia” de los resultados ordinarios, subrayando que el Santander prevé tener más ahorros de los previstos inicialmente en Europa y la actividad está retornando a los ritmos preCovid.

En cuanto al pago de 0,10 euros por acción como remuneración complementaria de 2019 y pagadera con entrega de acciones, aseguró que “debe entenderse” como “una medida extraordinaria” adoptada para “cumplir con la responsabilidad” con los accionistas ya que la intención es “aplicar una política de dividendo 100% en efectivo” a los accionistas “a partir de 2020”.

Con su abono se elevará a 0,20 euros el dividendo total entregado por la entidad con cargo al ejercicio 2019. Y en cuanto al abono de otros 0,10 euros por acción en efectivo y con cargo a la reserva por prima de emisión de acciones ya con cargo al ejercicio 2020 detalló que “representa una rentabilidad a los precios actuales de casi el 6%”.

(SERVIMEDIA)
27 Oct 2020
ECR/gja