Moción de censura
Unidas Podemos acusa a Vox de generar odio y agresiones como arma política
- Su portavoz adjunta lee nombres de diputadas republicanas en respuesta a las víctimas de ETA
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Unidas Podemos acusó este miércoles a Vox de generar odio y como arma política, e incluso "generar un clima propicio para que se den agresiones por motivos ideológicos".
El grupo parlamentario encomendó a cuatro diputadas su intervención en el debate de la moción de censura de Vox. La primera en hablar fue la más joven del grupo, Lucía Muñoz, comenzó prefigurando que Vox nunca leerá en el Congreso los nombres de víctimas de “violencia machistas”, y siguió acusando a su presidente, Santiago Abascal, de haber batido ayer “el récord de bulos por minuto”.
Muñoz criticó que monten “un teatro” en la semana de más contagios de coronavirus, con una iniciativa que “no es una moción de censura, es una moción de destrucción”, que sirve para “señalar a sus adversarios y enemigos políticos” para que luego sus “escuadristas” actúen violentamente contra ellos. Por ello, acusó a Vox de “matonismo” y aseguró que “da miedo”.
Después, la portavoz adjunta de Unidas Podemos, Sofía Castañón, comenzó leyendo los nombres de diputadas de la Segunda República, en paralelismo con lo que hizo Abascal con los de las víctimas de ETA; y aventuró que la sociedad “camina con paso firme y gafas violetas” hacia ese horizonte republicano.
Aseguró que Vox habla de “consenso progre” porque tienen “recursos por encima de la media y falta de empatía” y se basa en la “explotación de otras personas”, y que “no le gusta prácticamente nada de España”, ni sus pueblos ni sus barrios. Y terminó espetándole que en este país “ lo único que no tiene cabida es su odio”.
A continuación subió a la tribuna ovacionada por casi toda la cámara y con los diputados de PSOE, Unidas Podemos y ERC puestos en pie la parlamentaria de En Comú Podem Aina Vidal, que volvía al Congreso por primera vez desde la investidura por haber estado inmersa en una lucha contra el cáncer.
Vidal abogó por el amor y la vida y lo contrapuso a que “el odio también puede ser un proyecto de país”, como a su juicio ocurre con Vox, que desde su punto de vista “vienen a generar ruido, confrontación, a poner en riesgo la conviencia y a crear caos”, porque “necesitan fango; si no, no pueden vivir”, y actúan “agitando nuestros legítimos miedos para generar odios”.
Después, se mofó de la “revuelta de los cayetanos” que “no estaban dispuestos a ayudar” contra el coronavirus, las “revoluciones con palos de golf”, según las denominó. Todo ello, diagnosticó, a fin de “crear crispación, confusión y oscuridad”, y “generar un clima propicio para que se den agresiones por motivos ideológicos”.
Finalmente, denunció la “pulsión imperialista” que a su modo de ver se esconde en la lucha de Vox contra las comunidades autónomas, cuando son éstas las que corren a cargo de los servicios sociales; aseguró que Vox quiere “que se jodan” los parados, las mujeres y Largo Caballero, y terminó reprochando que la única derecha con sentido de país es hoy la CEOE y que en Vox “quieren más a un trozo de tela que a las personas que integran el país”.
La última en intervenir fue Roser Maestro, de IU, quien también enjuició que Vox “utiliza la desgracia para hacerse campaña” y “se dedican a la confrontación y la riña”. Dijo que le gustaría, también a ella, leer los nombres de las víctimas del franquismo, pero que tardaría meses, y pidió a Vox que “dejen de insultar a la inteligencia equiparando víctimas y verdugos” de la Guerra Civil, pese a ser “herederos ideológicos” y “familiares directos” de franquistas.
Para terminar, concluyó que en Vox “odian a la España que trabaja, a las mujeres, a los mayores, a los españoles de las nacionalidades que hablan lenguas tan españolas como el castellano”, y aseguró que en el partido de Abascal “no son dignos de ser españoles” y pronosticó: “La historia no les absolverá, les condenará por alta traición”.
(SERVIMEDIA)
22 Oct 2020
KRT/gja