Así lo indicó el director general de Seguros y Fondos de Pensiones del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Sergio Álvarez, durante su intervención en el XI Encuentro del Sector Financiero organizado por KPMG y ‘Expansión’.

El responsable de seguros del Ministerio señaló que las nuevas tablas biométricas supondrán una actualización de las dotaciones que debe hacer el sector asegurador y permitirán un “trato justo a los clientes” al aplicarles hipótesis actualizadas sobre esperanza de vida para calcular las primas en los seguros de fallecimiento. En este último caso, dijo que con la actualización, el precio de esos productos "deberá ser menor".

Álvarez explicó que la normativa que se aprobará prevé un “mecanismo de monitorización de la longevidad”, de manera que no se deban acometer cambios “profundos de vez cuando”, sino que se haga un “ajuste fino” de las hipótesis sobre esperanza de vida.

En cuanto a la gestión de la crisis derivada del Covid-19 que está haciendo el sector, el director general de Seguros destacó el “enorme esfuerzo” para garantizar la continuidad de sus actividades.

Señaló que, al principio de la crisis, “había cierto temor” por un riesgo de liquidez en la industria e indicó que cerca de 60.000 ahorradores han sacado del sistema en torno a 100 millones de euros, lo que es una cantidad “muy moderada”.

Ante la cuestión sobre si habría que devolver a los asegurados parte de la prima por la siniestralidad que se ha evitado durante la pandemia, consideró que “no puede haber soluciones simplistas” en esa dirección.

Por otra parte, indicó que el mundo de los seguros se va a transformar por la vocación del sector de prestar servicios y por el desarrollo de nuevos productos con una importante base tecnológica. En este sentido, señaló que el Ministerio está “a punto” de aprobar la nueva ley de transformación digital en el sistema financiero que “abrirá la puerta” a esos cambios.

En los seguros de vida, Álvarez comentó que también deberá innovarse en el futuro, de manera que “tendrán que depender menos del régimen fiscal y tendrán que buscar alguna capacidad de trasladar a sus clientes la conveniencia de determinadas coberturas”.

Por último, confió en que el sector siga con una gestión “prudente”, abra la puerta a la innovación en los productos y “siga siendo confiable”.