Este frío atípico se debe a varias razones, según explicó este jueves Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), en declaraciones facilitadas a los medios.

Así, en los últimos días han llegado a España vientos del norte que han arrastrado una masa de aire frío. "Ese flujo del norte, ya más debilitado, va a continuar durante el jueves y el viernes, pero tendrá un componente continental, es decir, llegará desde el interior del continente europeo y será, por lo tanto, un aire frío y seco".

Además, el viento tenderá a amainar, lo que, según Del Campo, "favorece que por la noche el aire más frío se asiente sobre la superficie, especialmente en zonas bajas como valles y llanos". "Como ese aire, además, será seco, los cielos estarán despejados y por las noches, que, además, ya comienzan a ser largas, el calor se escapará al espacio exterior", dijo.

Esos tres factores (aire frío y seco, vientos flojos o en calma y noches despejadas) facilitarán unas atípicas heladas. "Estas temperaturas nocturnas tan bajas poco habituales para la época se sitúan entre 5 y 10 grados por debajo de lo normal para mediados de octubre. De hecho, se trata de valores más propios del mes de diciembre", añadió.

ALGUNOS DATOS

El frío nocturno ya comenzó a sentirse en la madrugada de este jueves, con heladas en cerca de 50 estaciones de la Aemet, ubicadas no sólo en zonas montañosas de la mitad norte peninsular, sino también en altiplanos y parameras del Sistema Ibérico de Castilla-La Mancha e incluso en la Meseta Norte. Destacan los -5,8ºC registrados en Cerler-Cogulla (Huesca) y los -5,3ºC en el puerto El Pico (Ávila), ambos en zonas montañosas. En zonas pobladas sobresalen los -3,4ºC de Cuéllar (Segovia), los -3,2ºC en Pedrosillo de los Aires (Salamanca), los -2,8ºC en Torla-El Cebollar (Huesca) y los -2,7ºC en Molina de Aragón (Guadalajara).

Para este viernes habrá un nuevo descenso de las temperaturas mínimas en la mayor parte de la península, que podría ser de hasta cuatro grados con respecto al jueves en las dos mesetas y otros puntos del norte y el este. Así pues, helará de nuevo en Pirineos, con temperaturas de unos -6ºC, y en buena parte de Castilla y León, norte de la Comunidad de Madrid y de Castilla-La Mancha, y sur de Aragón con valores de hasta -3ºC.

La predicción de la Aemet, recogida por Servimedia, indica que en la madrugada de este viernes se congelarán Cuenca, León y Soria (-1ºC) y Ávila, Burgos, Palencia y Valladolid (0ºC).

El sábado se espera un ascenso térmico en buena parte de esas zonas frías, aunque las temperaturas bajarán en la cuenca del Ebro. Así pues, helará sobre todo en zonas montañosas del norte y centro peninsular, y débilmente en parameras del centro y puntos de la Meseta Norte, así como en el interior del País Vasco y lugares de Navarra y La Rioja. Esa madrugada se congelarán capitales como Burgos, Soria y Teruel (0ºC).

NUEVA BORRASCA

Por otro lado, Del Campo indicó que una borrasca atlántica se irá descolgando poco a poco de latitudes altas y se situará al oeste de la península durante el fin de semana. "Estará lo suficientemente alejada de nosotros como para que no deje precipitaciones. Notaremos su influencia de otra manera, ya que desde su posición enviará vientos del sur, así que cambiará radicalmente la situación con respecto a los días previos", añadió.

Esos vientos del sur harán subir las temperaturas tanto diurnas como nocturnas, aunque el domingo todavía puede haber heladas débiles en puntos aislados de la Meseta Norte, en parameras y en zonas de montaña. Las heladas prácticamente desaparecerán el próximo lunes.

Respecto a las temperaturas diurnas, el domingo se superarán los 20 grados en amplias zonas de la Meseta Norte, la cuenca del Ebro y el centro peninsular; incluso habrá más de 25 grados en Extremadura y Andalucía.

Los termómetros marcarán este lunes más de 20 grados en amplias zonas de España, con más de 25 grados en buena parte de la mitad sur peninsular e incluso se rondarán los 30 en el valle del Guadalquivir.

En cuanto a las lluvias, Del Campo subrayó que serán "escasas" en la península y Baleares entre el viernes y el lunes. "Puede llover débilmente en puntos de Galicia y del Cantábrico el viernes y el sábado, pero, en general, durante el fin de semana brillará el sol y no lloverá, salvo en Canarias, donde estarán los cielos más nubosos y habrá lluvias y chubascos, especialmente en las islas más occidentales", apostilló.

Ya el lunes por la tarde, con el acercamiento de otra borrasca bastante profunda a la península, podría empezar a llover en Galicia y otros puntos del extremo occidental peninsular, así como en Canarias.

Las precipitaciones se extenderán el martes a buena parte del norte, oeste y centro de la península, donde podrían ir acompañadas de tormenta. Serían fuertes y persistentes en áreas de Galicia, el entorno del Sistema Central, la Cordillera Cantábrica, puntos de los Pirineos y zonas de Extremadura y Andalucía occidental.

"En principio, estas lluvias no llegarán el martes ni al sureste peninsular ni a Baleares, aunque sí podrían alcanzar estas zonas en días sucesivos, ya que la inestabilidad continuará al menos hasta el jueves. También habrá lluvias en las islas occidentales de Canarias y las temperaturas nocturnas, con los cielos cubiertos y los vientos del sur y suroeste, seguirán subiendo. Y bajarán las diurnas, aunque con esos vientos del oeste y del suroeste el ambiente será cálido en el área mediterránea", concluyó Del Campo.