Banco de España

La deuda de empresas y hogares subió hasta el 141,2% del PIB en el segundo trimestre

- La riqueza financiera de los hogares cayó un 0,5%

MADRID
SERVIMEDIA

La deuda consolidada de las empresas y los hogares alcanzó los 1,654 billones de euros en el segundo trimestre de 2020, un 141,2% del PIB y 8,9 puntos porcentuales por encima de la ratio registrada un año antes.

Según los datos publicados este jueves por el Banco de España, el repunte se debe tanto al aumento de la deuda como, en mayor medida, al descenso del PIB a raíz de la crisis.

La deuda consolidada de las sociedades no financieras representó un 80,6% del PIB (si se incluyese la deuda interempresarial, la ratio sería un 102,7%), mientras que para los hogares fue un 60,6%.

En el segundo trimestre de 2020, el flujo neto acumulado en los últimos cuatro trimestres de financiación consolidada recibida por las empresas y los hogares fue de 41.000 millones, lo que representó un 3,5% del PIB. La financiación nueva captada por las sociedades no financieras registró, en términos netos, un flujo del 4% del PIB, mientras que en los hogares representó un flujo negativo equivalente al -0,5% del PIB.

Las operaciones financieras netas de los sectores residentes (empresas, hogares, instituciones financieras y administraciones públicas) registraron en el segundo trimestre de 2020, en términos acumulados de los últimos cuatro trimestres, un superávit de 21.500 millones, equivalente al 1,8% del PIB, frente al 2,4% observado un año antes.

El saldo de activos financieros de los hogares alcanzó a finales del segundo trimestre un importe de 2,356 billones de euros, un 0,6% inferior al de un año antes. Esta disminución es el resultado de una adquisición neta de activos financieros de 65.800 millones en el último año y de unas revalorizaciones netas negativas de 80.700 millones.

En relación con el PIB, los activos financieros totales de los hogares representaron un 201,1% a finales del segundo trimestre, lo que significa 7,8 puntos porcentuales más que un año antes.

Por componentes, el grueso de los activos financieros de los hogares se encontraba en efectivo y depósitos (el 41% del total), seguido de participaciones en el capital (25%), seguros y fondos de pensiones (16%) y participaciones en fondos de inversión (14%).

La riqueza financiera neta de los hogares, que se obtiene deduciendo los pasivos de los activos financieros totales, se situó en 1,588 billones a finales del segundo trimestre, lo que supone una caída del 0,5% respecto a un año antes. En relación con el PIB, los activos financieros netos representaron el 135,5%, ratio que es 5,5 puntos superior a la de un año antes.

(SERVIMEDIA)
15 Oct 2020
MMR/gja