AI afirmó tener informes de que las fuerzas de seguridad dispararon el pasado jueves desde vehículos blindados contra los manifestantes y atacaron a otros que se habían refugiado en algunas casas, lo que causó la muerte de al menos 11 personas.

"Los acontecimientos en Yemen están tomando un giro serio hacia lo peor y las fuerzas de seguridad yemeníes están mostrando un desprecio temerario por la vida humana", comentó Philip Luther, director adjunto de AI para Oriente Medio y África del Norte.

Luther señaló que las autoridades deben garantizar que los heridos reciben tratamiento médico y "en ningún caso" debe bloquearse la asistencia médica urgente, "sobre todo cuando la vida de las personas puede estar en riesgo".

Un médico aportó a AI su testimonio: "Fui a la zona de Al Mualla (norte de Yemen) a llevar los heridos al hospital, pero cuando llegué las fuerzas de seguridad se negaron. Les mostré mi identificación y les dije que era médico y que quería ayudar a los heridos que sangraban en las calles, pero me dijeron: ¡Van a morir!".

Según Amnistía, un total de 27 personas han muerto por las recientes protestas en Yemen. "Las autoridades deben iniciar una investigación inmediata e independiente sobre los asesinatos de manifestantes y transeúntes en Yemen y los informes sobre la denegación de acceso a la asistencia médica", concluyó Luther.