Lo dijo en una entrevista en Antena 3 recogida por Servimedia al referirse a la crisis generada por la decisión del Gobierno de que el Monarca no acudiera a la entrega de despachos de la 69 promoción de jueces celebrada en Barcelona. Al término del acto, el Rey envió un mensaje a Lesmes, en el que le decía que le hubiera gustado acudir al acto. El presidente del CGPJ comunicó el contenido del mensaje a los presentes.

Garzón publicó después un mensaje en su cuenta de Twitter en el que acusó al jefe del Estado de “maniobrar contra el Gobierno democráticamente elegido incumpliendo la Constitución” que le “impone neutralidad”. Su postura fue respaldada por Iglesias.

Ante esta situación, Robles reflexionó sobre la importancia de que “cualquier país democrático, mucho más en una situación como la actual, necesita algo fundamental: instituciones sólidas y creíbles que no estén puestas en cuestión”.

Esto le sirvió para hacer una defensa a ultranza de la Monarquía, a la que consideró “fundamental y esencial” a la hora de dar “consistencia interna” al país y proporcionarle “solidez” en el exterior.

“Nos hacemos un flaco favor”, aseveró Robles, “poniendo en cuestión instituciones como la Monarquía o la independencia del Poder Judicial”.

Por ello, recomendó a todos aquellos que ostentan responsabilidades políticas y judiciales que defiendan las instituciones “con sentido de Estado” y “responsabilidad”, lo que le sirvió para dejar claro que la Jefatura del Estado “está perfectamente representada” por Felipe VI, de quien dijo que “representa magníficamente su papel constitucional” desde la “neutralidad política”.

Tras dejar claro que no comparte “comentarios carentes de responsabilidad” como los emitidos por Iglesias y Garzón, extendió su crítica a Lesmes, a quien acusó de filtrar “llamadas privadas” del Rey con una “finalidad política”: la de “criticar y poner en cuestión al Gobierno”.

Robles también se refirió a la tramitación del indulto a los condenados por el ‘procés’ que el Gobierno tiene previsto iniciar próximamente. Lo hizo, sin entrar en el fondo de la cuestión, aduciendo que a la hora de aplicar esta medida de gracia se han de “valorar las circunstancias concretas de cada caso” y las posición del “tribunal sentenciador y del Ministerio Fiscal”.

Por último, reiteró su malestar ante el hecho de que el CGPJ “lleve dos años en prórroga”, lo que le permitió acusar al presidente del PP, Pablo Casado, de utilizar como “rehén” al órgano de gobierno de los jueces. “No podemos poner en cuestión la Monarquía con comentarios no procedentes ni utilizar al CGPJ para atacar al Gobierno”, remachó.