Los vecinos denuncian que este centro, que presta asistencia a más de 30.000 personas solo cuenta con entre "cuatro y seis profesionales en el turno de mañana y ninguno por las tardes, dejando el centro desatendido".

"Este personal no es propio del centro de salud, si no que procede de otros centros e intervienen de forma itinerante. Este hecho genera una peor calidad de atención al ser personal que no conoce el expediente en detalle de los pacientes y disponer de un tiempo aún más limitado del habitual para su examen", afirman.

Considera esta asamblea de vecinos que "las necesidades estimadas para el correcto funcionamiento del ambulatorio y garantizar el derecho a la salud de las personas que acuden a él son de 14 facultativos, siete por la mañana y siete en el turno de tarde. Cuando la propia Administración madrileña reconoce que la pandemia esta desbocada en Madrid y confina y segrega buena parte del distrito de Carabanchel, cuando el barrio de Abrantes va a ser una de las próximas zonas que también va a ser confinada es inadmisible la situación que se vive en este Centro de Salud".