Lo hizo en rueda de prensa antes de la Junta de Portavoces con motivo del fin del plazo, que expiraba ayer, para que la multinacional estadounidense vendiera las instalaciones a otra empresa y no se perdieran los mil puestos de trabajo que dependen de ella.

Una vez constatado que Alcoa no tiene intención de vender la planta sino que prefiere eliminar a un potencial competidor en España, El BNG estima que sus intereses empresariales no pueden estar por encima del interés general español, por ser un sector estratégico y por los empleos en riesgo.

"El Gobierno tiene que estar en disposición de nacionalizar la planta de alumnio", subrayó. "Ahora ya no hay otra solución". Recordó que la SEPI intervino en la compra de la planta y que Alcoa hizo "un grandísimo negocio con cientos de miles de euros de ayudas públicas" y además dejó un grave impacto medioambiental", por lo que ahora no puede pretender cerrar y dejar tirados a los empleados.

Como posibilidad subsidiaria se mostró dispuesto a que el Estado nacionalice la planta de Lugo para luego venderla a la empresa Liberty House, lo que permitiría mantener los puestos de trabajo, pero a su entender es preferible que pase a ser de propiedad pública.