Lo dijo durante la rueda de prensa conjunta que ofreció junto con su homólogo esloveno, Anze Logar, en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, tras conocerse la sentencia del Tribunal Supremo que ratifica la inhabilitación de Torra como presidente de la Generalitat.

La jefa de la diplomacia española aprovechó la sentencia del Supremo para proclamar que “España es un Estado de derecho en el que hay una separación de poderes”, si bien eludió pronunciarse sobre el contenido de la misma amparándose en su respeto a la Justicia.

Esto le sirvió para dejar claro que en España, como “país democrático” en el que reina el Estado de derecho, “todos tenemos la obligación de respetar la ley: los ciudadanos y los gobernantes”.

Por ello, aventuró que, si en sus visitas a terceros países alguien se interesa por la situación de la Justicia en España, trasladará que en el país rige la separación de poderes y que ésta actúa con independencia.