Lo hizo en la rueda de prensa posterior a la reunión de la Ejecutiva del partido republicano, coincidiendo con el fallo que confirma la inhabilitación de Torra por el Tribunal Supremo por haber mantenido una pancarta en defensa de la libertad de expresión durante la campaña de las elecciones generales de noviembre, desobedeciendo así a la Junta Electoral Central.

Ante lo que describió como “un ataque a la democracia sin precedentes”, aunque enmarcado en la “causa general contra el independentismo”, Vilalta reiteró la apuesta de su partido por una “respuesta conjunta” de todo el movimiento independentista, que pueda “reforzar al Gobierno” catalán y permitir que éste “siga siendo útil a los ciudadanos” ante la emergencia sanitaria y reduciendo en lo posible su provisionalidad ahora que Torra ha sido inhabilitado.

Desde ese llamamiento a reducir la provisionalidad, ERC venía reclamando a Torra que adelantara las elecciones catalanas, pero Vilalta hoy dio por hecho que no será así, aunque el presidente todavía podría convocarlas hasta que reciba la notificación de su inhabilitación. “Las elecciones vendrán determinadas por la Ley de Presidencia. Van a ser cuando la ley prevé”, constató, dando por hecho que sólo se convocarán automáticamente 54 días después de que se cumplan dos meses sin nuevo candidato a la investidura.

Aunque, descartado el adelanto electoral, ya sólo queda por consensuar entre las dos fuerzas independentistas cómo se gestionará el período en funciones que se avecina, Vilalta aseguró que en ERC son “plenamente optimistas” de que finalmente fructificará.

“Acuerdo va a haber porque es lo que tiene que haber”, garantizó, sin querer entrar, pese a las reiteradas preguntas de los periodistas, en ningún punto del contenido ese pacto que, dijo, ERC y JxCat están “acabando de ultimar”, y que negocian“ hablando de muchísimos temas”. No confirmó ni desmintió que la posición ante los Presupuestos Generales del Estado sea uno de esos temas.

Apelando a que las bases independentistas están pidiendo esa respuesta conjunta, Vilalta renunció tácitamente a un adelanto electoral consensuado entre los dos partidos. "A nadie se les escapa que nosotros propusimos que fuese el propio presidente quien convocara a las urnas, pero priorizamos el acuerdo”, justificó. “La mejor respuesta es la que podamos pactar y acordar”.

En otro orden de cosas, Vilalta aseguró que “es evidente que si hay movilizaciones (contra la inhabilitación) nos sumaremos”, pero precisó que ERC se está centrando en elaborar “la respuesta política ante una situación tan grave”.