Lo dijo durante su intervención ante el Pleno del Senado después de que Sánchez informara de las líneas generales de la actuación del Gobierno, en la que destacó que el “conflicto territorial” con el País Vasco y Cataluña pasa por la “inflexibilidad del reconocimiento de la identidad territorial” de ambos territorial de ambos territorios, a los que presentó como una nación.

Por ello, invitó a Sánchez a resolver ese “conflicto político” con “diálogo” y “valentía”, para lo cual comprometió el concurso del PNV.

No obstante, lamentó que durante la aplicación del estado de alarma, en los momentos más duros de la pandemia, se “agredió” al autogobierno y se tendió a la “recentralización”, un tic que atribuyó por igual tanto a la izquierda como a la derecha.

Por su parte, advirtió de lo nocivo de afrontar las consecuencias económicas y sociales de la pandemia con los presupuestos aprobados en 2018 y consideró positiva la aprobación del Ingreso Mínimo Vital (IMV), aunque llamó la atención ante el hecho de que este instrumento llega tarde al resto de España, ya que en el País Vasco se aprobó un instrumento similar -la Renta de Garantía de Ingresos- hace 30 años.