El estudio de la empresa, basado en los datos del segundo trimestre publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) desde 2005 hasta los últimos disponibles de 2020, también revela que este descenso se traduce en 221.600 ocupados menos y es el tercero más pronunciado de la serie analizada, solo superado por las cifras de 2014 (-11,9%) y 2009 (-9,4%).

Asimismo, el análisis señala que la cifra más alta de ocupados que estudian se produjo en 2008, cuando había 2,87 millones de personas en esta situación. Desde entonces se constató una tendencia a la baja hasta 2016, cuando se registró el volumen más bajo (2,06 millones). A partir de ahí el indicador "creció de manera significativa", un 20,5% hasta 2019, y cayó en este último año un 8,9%.

Según el estudio de Randstad, de los 18,6 millones de ocupados en España solo el 12,1% compaginan estudios y trabajo, un porcentaje cinco décimas inferior al registrado el pasado año (12,6%).

El peso de los ocupados que estudian con respecto al total de ocupados ha oscilado desde 2005 entre el 14,3% y el 11,3% y el porcentaje alcanzando en 2020 es el tercero más bajo y nueve décimas inferior a la media del estudio (13%).

Otra de las conclusiones del informe es que el único segmento de edad de ocupados estudiantes que crece frente a 2019 es el de mayores de 45 años, un colectivo que pasó de 776.900 profesionales el año pasado a 809.800 en este (4,2%).

En tanto, la caída más acusada produjo entre los menores de 25 años, que pasó de 353.200 profesionales de 2019 a los 256.700 actuales, un descenso del 27,3%. Además, los ocupados estudiantes de entre 25 a 45 años, el colectivo más numeroso, experimentó un retroceso del 11,7%.