Según informó el Ayuntamiento de la localidad, este dispositivo tiene como objetivo que, “durante las fechas en las que suelen celebrarse las fiestas municipales, puedan producirse aglomeraciones o concentraciones que pongan en riesgo la salud”.

Este plan está en marcha desde ayer y se prolongará hasta el 8 de septiembre, días en los que el consistorio considera que “podría haber un mayor riesgo de incumplimiento de las medidas anti-Covid”. Para su aplicación, se ha reforzado el personal de Policía Municipal, que se coordinará con Protección Civil, servicios de bomberos y Policía Nacional, y se cuenta con la colaboración de la Empresa de Servicios Municipales de Alcorcón (Esmasa) y las concejalías de Mantenimiento y Salud.

“En otros municipios ha habido problemas en las fechas donde se celebraban las fiestas del municipio porque se han producido aglomeraciones de gente. Lo que estamos haciendo es reforzar los servicios, porque en el periodo del 2 al 8 de septiembre consideramos que hay más riesgo en la ciudad de que se produzcan estos incumplimientos.”, explicó la alcaldesa de Alcorcón, Natalia de Andrés.

Estas medidas se suman a otras análogas que el Ayuntamiento de Alcorcón ha puesto en marcha durante el verano para evitar aglomeraciones y concentraciones de gente asociadas a la celebración de botellones.