Portero explicó al juez que en la “txosna” se exhibían cerca de un centenar de fotografías de etarras, entre ellas los retratos de Harriet Iragui Gurruchaga y Jon Igor Solaba, los autores materiales del asesinato de su padre, el fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Luis Portero.

Además, Portero indicó que en la caseta se exhibía toda una serie de carteles con la simbología propia del entorno de ETA, como pancartas a favor de la amnistía de los presos etarras o de organizaciones ilegalizadas como Askatasuna y Ekin, según explicaron fuentes jurídicas consultadas por Servimedia

Por último, el presidente de Dignidad y Justicia explicó a Grande-Marlaska que estas “txosnas” proetarras se financian con dinero del Ayuntamiento de Bilbao, unas partidas económicas que nunca son justificadas y cuyos excedentes se sospecha que sirven para financiar a las organizaciones juveniles que apoyan a ETA.

Además, Grande-Marlaska también tomó declaración hoy en calidad de testigos a Rosario Portero, hermana del presidente de Dignidad y Justicia, y a un amigo de la familia. Ambos acudieron junto a Daniel Portero a la “txosna” en la que se exhibían las fotos de los etarras.

Tanto la hermana de Portero como el amigo de la familia explicaron al magistrado que los retratos de los miembros de ETA estaban expuestos al público y se podían ver claramente desde la calle.

Grande-Marlaska intentó tomar declaración ayer a Alex Zuluaga, representante legal de la asociación propietaria de la “txosna”, pero éste se negó a declarar.

El magistrado, a la espera de nuevas peticiones de diligencias, decidió mantener la imputación que pesa sobre Zuluaga, a quien Dignidad y Justicia acusa de un delito de enaltecimiento del terrorismo y de humillación de las víctimas.

Las fuentes consultadas subrayaron que tanto a la declaración de Zuluaga como a las comparecencias de hoy no asistió ningún representante de la Fiscalía.