En declaraciones a la Cadena Ser, Bono afirmó que no tiene ganas de ser el candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno. "No me perdonaría dejar de ser presidente (de Castilla-La Mancha) para ser candidato, que ha sido siempre la expresión que he repetido antes, durante y hoy, el día después, la vuelvo a mantener", afirmó.

El dirigente socialista se mostró satisfecho de la victoria obtenida por su partido en las cinco provincias de la comunida castellano-manchega y destacó especialmente la caída de "la Guadalajara de Tomey".

También señaló que el PSOE, en cuanto a las elecciones municipales, se encuentra a tan sólo 36.000 votos del PP. A su jucio, en el PP están muy preocupados porque sus dirigentes son conscientes de que pueden perder las próximas elecciones generales.

Por último, reconoció que en Toledo no gobernará su partido por 72 votos de diferencia, aunque recordó que en Talavera de la Reina el PSOE consiguió la mayoría absolut.