En declaraciones a Servimedia, Ezquerra rechazó la postura “negacionista de la evidencia” por parte de los manifestantes ante una pandemia que, dijo, “hemos vivido muy de cerca, ha significado cientos de miles de infectados y decenas de miles de fallecidos y ha golpeado muy duro a nuestros mayores”.

“No tiene mucho sentido que alguien siga este tipo de ideas que dan por hecho cosas que están absolutamente fuera de toda evidencia científica”, lamentó, al tiempo que reconoció que los profesionales médicos “vivieron mal” esta convocatoria, porque supone “negar la evidencia”.

Así, insistió en que al personal médico le parece una “irresponsabilidad manifiesta” que, “en una sociedad avanzada, del siglo XXI, haya un grupo de gente que pone en riesgo no solo su salud, sino la de los demás” secundando este tipo de convocatorias que, a su juicio, podría ser incluso “perseguible desde el punto de vista judicial” si se demuestra que fue instigada “de forma clara” por alguna persona u organización.

Con respecto al “segmento importante” de la ciudadanía que, a su entender, está haciendo “caso omiso” a las recomendaciones sanitarias, sugirió que su comportamiento puede obedecer a una posible falta de "inisistencia" desde las instituciones para recomendar el uso, "sí o sí, de la mascarilla, el distanciamiento social o la necesidad de evitar reuniones masivas”.

"SUPERVIVIENCIA DEL PAÍS"

“Nos jugamos mucho, porque no son solamente los aspectos sanitarios, que son muy graves, sino la supervivencia misma de este país desde un punto de vista socioeconómico”, advirtió, para, a continuación, asegurar que, si la vuelta al colegio y a la actividad presencial de las empresas a partir de septiembre no se puede producir en “condiciones aceptables, estamos abocados a para la mayor crisis vivida en España desde la posguerra”.

Por ello, urgió a “educar a la población para que respete las normas y no ponga en riesgo al resto de la ciudadanía” y llamó a la “sensatez”, instando a todos a “hacer caso a las autoridades sanitarias” así como a “tomarse en serio algo que, de verdad, es muy serio”. “Esto es una pandemia y las pandemias dejan muchísimos fallecidos e infectados y muchísimas secuelas a quienes superan la enfermedad”, sentenció, convencido de que, “afortunadamente, la mayoría de la población es sensata y coherente, sabe la situación en la que nos encontramos y está respondiendo con responsabilidad”.