Así lo indicaron este jueves el consejero delegado del grupo, Onur Genç, y el director financiero, Jaime Sáenz de Tejada, durante una rueda de prensa en la que explicaron que los actuales ‘números rojos’ son fruto de un ajuste por valor de 2.084 millones en el fondo de comercio en la filial de Estados Unidos y otros más de 2.000 millones en provisiones realizadas frente a potenciales deterioros futuros por la crisis del Covid-19.

El primero es un ‘one off’ que no se va repetir y en cuanto a las provisiones auguraron que “van a ser mucho menores” mostrándose, en cualquier caso, prudentes ya que hay muchas incertidumbres a cerca de la evolución de la pandemia y sus consecuencias.

“Sí, esperamos cerrar el año con resultados claramente positivos a nivel de grupo y, desde luego, en España”, sostuvo el consejero delegado y explicó que el ajuste de valoración en los fondos de comercio en EEUU obedece a que estaban contabilizados al precio de cuando se compró el negocio en los años 2007-2009 y se deteriora ahora por las peores expectativas de resultados en el país con la crisis.

Ante la pregunta de si se podrían repetir los ajustes en los fondos de comercio de México y Turquía, donde las expectativas de negocio son también inferiores por la misma pandemia, el director financiero minimizó dicha eventualidad.

Según detalló, el valor en libros de la filial azteca es de 9.500 millones y de sanear serían 450 millones en fondo de comercios; cifra que en Turquía se reduciría a 300 millones, al estar ya contabilizada a 3.900 millones. “Son cifras muy, muy, muy reducidas que no tendrían, en cualquier caso, ningún impacto material para el grupo”, apuntó.

En cuanto a la potencial hucha a construir en provisiones por la propia evolución del crédito con la crisis mundial, el consejero delegado se mostró optimista al considerar que el esfuerzo será muy inferior al ya acometido en la primera parte del año.

Su previsión es que el coste del riesgo, que incluye esos saneamientos, suba desde los 1,40 puntos básicos actuales al 1,5-1,8. En el caso específico de España auguró que incluso será inferior a los 100 puntos que se habían estimado inicialmente.

Según el banquero, la situación es distinta a la crisis anterior ya que las empresas se encuentran en una posición mucho menos endeudada y “sus balances están mucho más saneados”, al igual que el de las familias.

Ante la pregunta expresa de si cabe la venta de algún negocio o filial, el director financiero aseguró que no hay previsión alguna dentro de los planes del grupo enajenar subsidiaria alguna más allá del negocio ya anunciado en Paraguay.

Tampoco prevén clausurar más oficinas de las ya comunicadas, aunque en el 2021 y 2022 dejó abierta la puerta a nuevos cierres en función del avance del uso de canales digitales por parte de los clientes. “Estimamos que cerraríamos 160 sucursales en España este año y mantenemos este objetivo”, sostuvo el consejero delegado, quien detalló que hasta julio se habían echado el cierre ya a 109. En cuanto a la plantilla aseguró que “no nos planteamos ninguna medida extraordinaria de reducción de plantilla”.