Así lo dijo durante su intervención en la presentación de la memoria sobre la situación socioeconómica y laboral de España del Consejo Económico y Social (CES).

Hernández de Cos destacó que se está detectando un “perfil de mejora” a raíz del proceso de reapertura económica que está reflejando una “recuperación incipiente”. Con ello, el tercer trimestre podría arrojar tasas de crecimiento económico intertrimestral de dos dígitos, según el gobernador del Banco de España.

No obstante, matizó que dicha recuperación es “incompleta”, “incierta” y “desigual” y que “probablemente no va a poder evitar” la caída del PIB al término de 2020.

Además, consideró que una retirada “prematura” de las medidas económicas para paliar los efectos de la crisis “tendría consecuencias económicas”, al tiempo que apostó por “permitir a la economía” que pueda realizar “ajustes estructurales”. “Estamos en una fase en la que hay que coger el bisturí y ser muy preciso”, consideró.

El máximo responsable del Banco de España se mostró favorable a extender las medidas de ayuda “con un carácter más focalizado”. Destacó que los avales públicos del Instituto de Crédito Oficial (ICO) han contribuido a “reducir las posibles reticencias que el sector financiero podría haber tenido para prestar”. En esta línea, hizo énfasis en “evitar a toda costa” un endurecimiento en las condiciones de financiación, con lo que “habrá que evaluar en qué medida la extensión de las líneas de avales es necesaria”.

Respecto a los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), Hernández de Cos afirmó que “hay que estar abiertos dependiendo de cuál sea la evolución económica en el futuro a extenderlos si fuera necesario de manera focalizada”.

Al hilo de este posicionamiento, el gobernador propuso utilizar la legislación laboral para llevar a cabo “ajustes”. “No tiene sentido que mantengamos sectores o empresas zombis durante mucho tiempo”, afirmó, para acto seguido pedir que los afectados por esos ajustes estén acompañados de políticas de empleo que les permitan seguir en el mercado laboral.

Hernández de Cos admitió que “un número importante” de empresas saldrá de esta crisis más endeudada y con unas perspectivas de demanda más débiles, por lo que urgió a disponer de un sistema “ágil” de reestructuración y solvencia.

Del mismo modo, instó a mejorar la productividad de la economía para reducir la desigualdad y mantener incrementos salariales, reducir la “elevada” dualidad en el mercado de trabajo, revisar los mecanismos de protección por desempleo y un “reparto más equitativo” de la protección entre trabajadores con distintos tipos de contrato.

En cuanto a la fiscalidad, a juicio del gobernador del Banco de España “es el momento de diseñar ahora” un programa fiscal “con una visión de medio plazo para aplicar después” en el que se revise el gasto público y la estructura impositiva para mejorar su capacidad recaudatoria. Hernández de Cos avisó de que “una vez que tengamos una recuperación sólida, tendremos que desarrollar inevitablemente un proceso de consolidación presupuestaria”.

También quiso referirse al acuerdo en el Consejo Europeo para el fondo de reconstrucción para financiar los gastos públicos por el Covid-19 y destacó del mismo que tiene muchos aspectos positivos y “el reto es convertir estos fondos en un impulso fiscal que acompañe” a los esfuerzos para la recuperación.