Así lo anunció este jueves el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, durante su visita a las obras que ya han comenzado, después de que el puente quedase clausurado el pasado fin de semana ante el riesgo de colapso estructural.

Ante esta situación, Almeida destacó que el Ayuntamiento ha actuado de manera inmediata y ha tramitado ya el contrato de emergencia adjudicado a Dragados por un valor aproximado de nueve millones de euros para que en un plazo de cuatro meses definitivamente desparezca este scalextric, uno de los últimos que quedan en la ciudad de Madrid.

A partir de ahí, continuó el regidor madrileño, la prioridad del Ayuntamiento es, en primer lugar, preservar la integridad física de los madrileños y, por tanto, desde el primer momento, evitar que se pudiera producir cualquier tipo de colapso que pudiera afectar a los madrileños.

En segundo lugar, minimizar en la medida de lo posible, los perjuicios considerables que “somos conscientes que los va a haber, a la movilidad de los vecinos del entorno. Por tanto, ello, se va a ir por etapas y se va a trabajar fundamentalmente de día y no de noche.

Además, lo que se pretende es que ya a lo largo del mes de septiembre, toda la zona de Príncipe de Vergara pueda quedar liberada de forma que, además, se genere un paso peatonal, porque “sino la distancia que hay para que se pueda cruzar de un lado a otro es demasiado amplia”. Por eso, “queremos priorizarlo”, remarcó el alcalde.

En tercer lugar, la idea es que, a partir de ahí, se tomen las medidas de movilidad suficientes para que, dentro de las limitaciones que se van a producir, que esta novena calle con el tráfico más denso en la ciudad de Madrid “no perjudique considerablemente todo el entorno de la movilidad”.

Por ello, Almeida comentó que se han adoptado medidas como la de, a partir de este lunes, cuando se prohíba totalmente la circulación por los laterales de este scalextric, la calle Velázquez será de doble sentido, así como que se va a desviar el tráfico hacia Diego de León y hacia Velázquez, además de otras medidas complementarias que “lo que pretenden es minimizar esos perjuicios”.

PROYECTO DE FUTURO

Preguntado por qué se hará cuando se derribe por completo el puente, el alcalde de la capital respondió que la idea de que se vuelva a hacer otro scalextric está descartada. Además, indicó que es “muy complicado técnicamente” que se pudiera plantear un túnel, por la complejidad de todas las infraestructuras que hay debajo, especialmente por las líneas de metro que pasan.

Por ello, en este momento estamos estudiando actuaciones en superficie que puedan, de la manera más rápida posible, “garantizar una movilidad sostenible”. Almeida señaló que se trata de un eje esencial este-oeste en la ciudad.

Por ello, sin perjuicio de que obviamente no se van a dar las mismas condiciones de movilidad que se daban con el scalextric, “lo que es cierto que es que no lo podemos interrumpir completamente”. Así, “vamos a hacer un planteamiento compatible para garantizar la movilidad, pero también lógicamente entre generar una mejor calidad en esta zona”, aseveró.

Almeida se mostró convencido de que todos los vecinos van a agradecer la desaparición del scalextric y a la vez que haya una actuación de urbanización compatible con esa movilidad, pero también con mayor sostenibilidad y mayor calidad de vida.

El regidor madrileño auguró que en las dos próximas semanas se pueda tener un estudio aproximado de cuál puede ser la solución más adecuada. “No podemos esperar a que acabe la obra, lo tenemos que hacer ya, para que inmediatamente se puedan acometer todas las obras de urbanización que sean necesarias”, concluyó.