Iberia explicó en un comunicado que este es “el primer gran proyecto de la compañía para mejorar la eficiencia energética de las infraestructuras, y que se suma a otras muchas iniciativas puestas en marcha por la compañía para reducir las emisiones tanto de sus actividades en vuelo como en tierra”.

Dentro del compromiso de alcanzar las cero emisiones netas en 2050, Iberia ya anunció en su momento toda una batería de iniciativas “para reducir el impacto de sus operaciones en vuelo y tierra, como la renovación de la flota con los aviones más sostenibles del momento, el uso de equipos eléctricos en tierra siempre que sea posible, nuevas medidas operativas para consumir menos combustible y por lo tanto emitir menos gases, entre otras”.

A partir de ahora, la aerolínea aseguró que “da un paso más para hacer eficientes también las instalaciones donde desarrolla una parte importante de sus trabajos en tierra”. La empresa con la que se ha asociado Iberia para dar este salto en términos de reducción de huella de carbono es Getting Greener.

La aerolínea se sitúa así entre las primeras grandes empresas españolas en iniciar la transformación del modelo económico de la Unión Europea (UE), dentro de las acciones prioritarias establecidas en el Green Deal, aprobado por la UE a finales del pasado año.