Banco de España

La riqueza financiera de los hogares cae un 1,1% y se sitúa cerca de los 1,53 billones en marzo por el Covid-19

-La deuda de empresas y familias se redujo al 129,9% del PIB, 3,7 puntos porcentuales inferior al año anterior

MADRID
SERVIMEDIA

La riqueza financiera neta de los hogares y las instituciones sin fines de lucro al servicio de los hogares en España ascendió a 1,527 billones de euros en el primer trimestre del año, lo que supone un retroceso del 1,1% frente marzo del pasado año y caer un 6,28% en relación a los 1,628 billones del cierre de 2019.

Su retroceso está muy vinculado a la pérdida de valor de los activos financieros con la caída de los mercados por culpa de la pandemia. La riqueza financiera neta se obtiene deduciendo de los pasivos o deudas el valor de los activos financieros totales y en marzo equivale a un 123,2% del PIB, ratio que es 4,4 puntos porcentuales inferior al registrado un año atrás, según detallan las cuentas financieras de la economía publicadas este miércoles por el Banco de España.

Por el lado del patrimonio, el saldo de los activos financieros de los hogares alcanzó al término del primer trimestre un importe de 2,288 billones, lo que implica un retroceso interanual del 1,1% por la caída de la bolsa.

El descenso fue el resultado de compras netas de activos financieros por valor de 43.000 millones en el último año y de unas revalorizaciones netas negativas por valor de 68.000 millones, fundamentalmente debidas a las caídas del precio de los activos de renta variable con la crisis del Covid-19.

En relación con el PIB, los activos financieros totales de los hogares representaron un 184,7% a finales del marzo, lo que significa 5,9 puntos porcentuales menos que un año antes.

La mayoría del patrimonio financiero de las familias se encuentra en efectivo y en depósitos (un 40% del total); seguido de participaciones en el capital (27%), seguros y fondos de pensiones (16%) y participaciones en fondos de inversión (13%). El efectivo y depósitos fue elcomponente que más incrementó su peso en los activos financieros de los hogares y lo hizo en dos puntos porcentuales, mientras que el peso de las participaciones en el capital fue el que más cayó, con un descenso interanual del 1,8%.

Por su parte, el flujo neto de financiación consolidada recibida por las empresas y los hogares ascendió a 5.700 millones de euros, cuantía que equivale a un 0,5% del PIB. La financiación nueva captada por las sociedades no financieras representó un flujo equivalente al 0,6% del PIB, mientras que la recibida por los hogares representó una contracción en una cuantía equivalente al 0,1% del PIB.

Las operaciones financieras netas de los sectores residentes (empresas, hogares, instituciones financieras y administraciones públicas) registraron en términos acumulados del trimestre un superávit de 30.000 millones de euros, equivalente al 2,4% del PIB, frente al 2,3% observado al cierre del 2019.

Obtuvieron un saldo positivo las instituciones financieras (2,9% del PIB) y los hogares (2,7%), mientras que en las empresas fue nulo y las administraciones públicas mostraron un saldo negativo del 3,2% del PIB.

La deuda consolidada de las empresas y los hogares alcanzó a su vez los 1,610 billones al cierre de marzo, cuantía que representa un 129,9% del PIB y supone un descenso de 3,7 puntos porcentuales frente al ratio existente un año antes.

Por su parte, la deuda consolidada de las sociedades no financieras representó a su vez un 72,8% del PIB (si se incluyese la deuda interempresarial la ratio sería un 93,1%), mientras que para los hogares e instituciones sin fines de lucro fue un 56,9%.

(SERVIMEDIA)
15 Jul 2020
ECR/gja