Coronavirus

"Tocar con seguridad" y disfrutar del arte, claves de la reapertura del Museo Tiflológico de la ONCE

- Sus trabajadoras aguardan con ilusión a los primeros visitantes

MADRID
SERVIMEDIA

El Museo Tiflológico de la ONCE en Madrid reabrirá al público el próximo martes, 7 de julio, con el compromiso de que las personas ciegas o con discapacidad visual grave podrán tocar las piezas allí expuestas "con total seguridad".

Así lo aseguraron a Servimedia María José Sánchez Lorenzo y Mireya Rodríguez Dilla, coordinadora y guía del museo, respectivamente. De este modo, las maquetas del Taj Mahal, la catedral de Santiago de Compostela o la Alhambra de Granada podrán ser 'palpadas' por los visitantes ciegos, "sin guantes pero con las manos bien limpias".

"Teníamos muchas ganas de volver a abrir, pero al mismo tiempo, nos parecía muy importante que nuestras obras se pudiesen tocar de nuevo", coinciden las dos. Según Sánchez Lorenzo, este museo "está pensado para acercar el arte a las personas con discapacidad visual grave", y para ello, "las obras tienen que reconocerse mediante el tacto, y además, sin guantes".

"Por eso, decidimos esperar un poquito más para la reapertura", prosigue, a fin de “tener clara la normativa y ofrecer esta posibilidad a nuestro público con discapacidad". El resto de visitantes, de momento, tendrán que esperar, lamentó.

SEGURIDAD

Las personas ciegas o con gran discapacidad visual que deseen visitar el museo deberán solicitar una cita previa y un guía les acompañará en todo momento y se asegurará de que cumplen con todas las medidas higiénicas precisas. Les facilitará hidroalcohol para que se laven las manos antes y después de tocar las piezas.

"De este modo, conseguimos que la experiencia se pueda realizar sin guantes", algo "fundamental para que las personas ciegas aprecien todos los detalles de las obras", explica Mireya Rodríguez Dilla,, guía del museo. "Nosotros sí portaremos guantes”, aclaró, para tocarles sin miedo e indicar el recorrido que deben seguir con sus manos".

Además, las obras que han sido "palpadas" pasarán una semana en cuarentena", resaltó. "Queremos que el riesgo sea totalmente cero". Eso sí, se vigilará para que siempre haya un número adecuado de piezas relevantes a disposición del público.

Por otro lado, la guía explicó que las visitas en grupo -de personas sin discapacidad- se han limitado a un máximo de seis, "para que en todo momento podamos controlar que se cumplen las medidas de seguridad".

Estas también deberán concertarse, aunque los ciudadanos que deseen visitar el museo de forma individual pueden hacerlo sin cita previa. El aforo máximo permitido es del 75% y el horario de apertura, durante el mes de julio, será de martes a viernes de 10.00 a 15.00 horas y de 16.00 a 19.00 horas. El teléfono para solicitar cita previa es el 91 589 42 19 o en el correo electrónico museo@once.es.

El Museo Tiflológico ha instalado un felpudo higienizante en la entrada, junto con un dispensador automático de loción hidroalcohólica para la desinfección de manos. Además, se han distribuido varios puntos de desinfección con gel hidroalcohólico en otros espacios del museo y es obligatorio el uso de mascarillas en todo el edificio.

El mostrador de recepción cuenta con una mampara de separación y bandas en el pavimento para guardar la distancia de seguridad, así como con otro punto de desinfección. También hay papeleras con pedal y tapadera basculante donde desechar guantes, mascarillas y pañuelos.

Por otro lado, las rutas de los itinerarios establecidos para las visitas se han modificado y marcado con flechas en el suelo, a fin de mantener una distancia de metro y medio entre ellas.

En la colección de reproducciones de monumentos se han instalado códigos QR para acceder a la información de las piezas; habrá disponibles audioguías gratuitas; se han retirado todos los folletos informativos y catálogos; los talleres que organiza el museo han sido suspendidos, y el servicio de guardarropa no está disponible.

Además, los recorridos por el Museo Tiflológico se han modificado y de manera permanente sólo estará abierta la planta principal, que muestra la colección de reproducciones de monumentos, colección de obras de artistas ciegos y sala de exposiciones temporales.

La colección de Tiflología sólo podrá visitarse en caso de tener reservada una visita guiada, mientras que la sala de material bibliográfico permanecerá clausurada. Según Mireya, Rodríguez los libros y documentos que contiene este espacio “son muy antiguos y delicados, y el contacto con el gel hidroalcohólico podría dañarlos". Por eso, siguiendo la premisa de que "queremos tocar pero con seguridad, hemos decidido mantenerla cerrada".

PRIMERAS VISITAS

Tanto Mireya como María José confiesan sentirse "muy contentas" de retomar su actividad ordinaria y esperan "ilusionadas" a los primeros visitantes. Un campamento de unos 30 niños de distintas edades y un grupo de 15 personas que realizan formación son las primeras citas confirmadas, detalla María José.

Los pequeños entrarán de seis en seis, "para que podamos vigilarlos bien, asegurarnos de que llevan las mascarillas y de que no tocan nada y, al mismo tiempo, "explicarles bien lo que están viendo para que disfruten de la experiencia".

Apuntó que "todo el tema de las maquetas les suele gustar mucho a los niños", que así se familiarizan con los métodos que tienen las personas ciegas para acceder al arte y a la cultura. Por su parte, los adultos del curso que ya han reservado entrarán de cinco en cinco.

Sin embargo, estos no serán los únicos visitantes en julio, ni mucho menos. "Desde hace una semana, nos llaman por teléfono para preguntarnos cuándo abrimos, y sé que ya se han sacado entradas", dijo Mireya.

"La verdad es que esto nos anima mucho y nos llena de alegría", confiesa, "porque siempre tienes la duda de cómo va a responder el público”. “Según lo que nos cuentan por teléfono y por las redes, la gente tiene muchas ganas de que el museo reabra, y eso da esperanza”. “Y nosotras, de hacerlo ya”, concluyen las dos.

(SERVIMEDIA)
04 Jul 2020
AGQ/gja/man