Con motivo de la Semana Europea de la Movilidad que se celebra desde hoy y hasta el 23 de septiembre, Greenpeace presentó en rueda de prensa la campaña "Transporte: el motor del cambio climático", dirigida por Sara Pizzinato.

Pizzinato afirmó que desde el año 1990, en la Unión Europea se ha incrementado en un 27% las emisiones de gases efecto invernadero, pero que en "España la situación es peor ya que las emisiones han crecido un 89%".

Según la responsable de la campaña, "el transporte nos sale caro" ya que, aunque aporta un 6% del Producto Interior Bruto, España se gasta 28.000 millones de euros en la importación del crudo, y supone un coste externo del 9,56% de la riqueza (58.000 millones de euros).

Por su parte, el director de Greenpeace, Juan López de Uralde, denunció la insostenibilidad del actual modelo de transporte e hizo "un llamamiento al Gobierno español para que cambie el modelo de financiación".

Según López de Uralde, es necesario crear en la reunión de Copenhague "una ley de sostenibilidad" para que el dinero que se destina "al Plan E o a Fomento para crear infraestructuras de carreteras" se utilice para la gestión de la demanda de actividades sostenibles y que se usen transportes no motorizados".

PROPUESTAS DE MEJORA

Greenpeace pidió que se reduzca la producción de vehículos (actualmente hay en España unos 22 millones) y que se incremente el uso de los ferrocarriles, que, a su juicio, "se ha ido abandonando desde los años 60 ó 70" y esta medida es una de las claves para revertir la sostenibilidad del transporte", indicó Pizzinato.

Según la experta, "la crisis es una oportunidad" de mejora ya que "las infraestructuras no dan puestos de trabajo estable"; sin embargo, "apostar por la movilidad sostenible implica más empleo y de más calidad".

Además, la organización exigió que el límite de emisión de CO2 sea de 80 gramos por kilómetro para el año 2020.

Por último, respecto al Día Internacional sin coches que se celebra el 22 de septiembre, Pizzinato aseguró que "cada vez tiene menos sentido hacerlo" ya que las administraciones "casi no se mueven".