En un comunicado, pidió que la norma incorpore un mayor enfoque de género durante su tramitación parlamentaria y que aborde "de manera más detallada las formas de violencia contra la infancia con marcado carácter de género, como el matrimonio temprano, la violencia callejera por razón de género, la mutilación genital femenina, la trata y la explotación sexual en Internet".

Además, debería recoger "medidas específicas para luchar contra roles y estereotipos de género que son la base de muchas formas de violencia hacia las chicas".

En su informe 'Los derechos de las niñas en España 2018', la ONG denunció que el ordenamiento jurídico nacional "generalmente ha invisibilizado a las niñas como sujeto de especial protección". Ellas son las principales víctimas de violencia en el hogar, ya que suponen el 57,3% de los casos, agregó, y son objeto de la violencia de género y los abusos sexuales muy por encima de los niños.

Por este motivo, la organización reclamó que los datos de violencia contra la infancia se recopilen de forma desagregada en cuanto al género y otras intersecciones, para disponer de información concreta y poner en marcha las medidas pertinentes.

Plan International trabajará para avanzar en el texto de la ley y hará llegar a los grupos parlamentarios sus propuestas. Su objetivo es "acelerar en la medida de lo posible" el posterior trámite parlamentario, que pidió se lleve a cabo "de la manera más urgente y con el consenso que requiere una ley de esta relevancia".

Según la ONG, estamos ante una norma "clave para garantizar el derecho de los niños y niñas a vivir libres de violencia, que puede convertirse en la más ambiciosa de los países de nuestro entorno en lo que respecta a los derechos de la infancia".