“Somos la generación a la que la crisis de 2008 les pilló en el cole, mientras estudiábamos o cuando intentábamos adentrarnos al mercado laboral. Ahora, además, vivimos de forma más severa las consecuencias de esta crisis del coronavirus”, trasladó a los diputados la vicepresidenta de las organizaciones juveniles, María Rodríguez Alcázar.

La representante, que compareció en la comisión de reconstrucción para trazar la estrategia para que España salga de la crisis del coronavirus lo menos dañada posible, afeó que “nos califican como la generación de las dos crisis” y, aunque “lo somos”, instó a los parlamentarios que “no nos llamen la generación perdida y comprométanse”.

El objetivo del plan de empleo que reclaman es recuperar “todo ese empleo que se ha destruido, principalmente en el sector juvenil” a consecuencia de la pandemia. Además, reivindican que el empleo de los jóvenes deje de estar caracterizado por la precariedad y la temporalidad que han provocado que los jóvenes sean la franja de edad más empobrecida en España.

En este sentido, reclamaron mayores bonificaciones para empleos fijos a jóvenes. “La juventud es el presente, no sólo el futuro. No nos vale con el compromiso a futuro, la juventud necesitamos medidas ahora para vivir con derechos”, declaró la vicepresidenta del Consejo de la Juventud a los diputados.

Además del plan de empleo, las organizaciones juveniles pidieron que el Ingreso Mínimo Vital llegue a los jóvenes para que puedan “rechazar ofertas de trabajo indignas”.

También reivindicaron medidas en materia de vivienda, ya que el 80% de los jóvenes sigue viviendo con sus padres y España tiene una de las edades medias de emancipación más altas de Europa, rozando los 30 años.

“Que las ayudas a la vivienda contemplen la emancipación juvenil y no pongan trabas que las hagan inaccesibles”, demandó María Rodríguez Alcázar.

Asimismo, el Consejo de la Juventud insistió en que, tras el confinamiento y la manera en la que la crisis ha afectado a los jóvenes, se desarrollen estrategias de salud mental “garantizando que las personas jóvenes tienen acceso a atención psicológica de forma accesible”.

En lo que respecta a educación, los jóvenes recordaron que la brecha digital afecta al 10% del alumnado, por lo que “son necesarios planes de refuerzo escolar durante el verano y próximos cursos”.

Entre sus reivindicaciones también está reforzar las becas en Bachillerato y FP agilizar su tramitación para que sean ingresadas a comienzo de curso.