Goirigolzarri realizó esta demanda en una entrevista en la Cope recogida por Servimedia donde estimó que colocar al frente del diseño del programa de reconstrucción a un empresario como ha decidido Italia “tiene puntos a favor”, ya que normalmente los empresarios cuentan con una “visión de gestión muy desarrollada”; pero también en contra, al “no conocer muy bien cuáles son los mecanismos de las administraciones”.

“Con independencia de quién se ponga al frente, lo que es importante es que el que esté enfrente oiga a las personas que realmente están en el tajo, a las personas que realmente saben, a las que conocen, en definitiva, a los empresarios, que son los que crean empleo”.

El banquero estimó que, “desde el punto de vista económico”, las medidas que se han tomado hasta ahora “han ido en la dirección correcta”, aunque toca “ir cambiando el enfoque” para surtir esos apoyos especializados por sectores de la mano de los empresarios.

“Si nosotros tomamos las decisiones correctas esta salida será más rápida y soy optimista porque los principales protagonistas de esta salida son los empresarios, los empresarios españoles, los autónomos, que han demostrado en el pasado una capacidad de reacción extraordinaria”, subrayó.

A título de ejemplo, indicó que en la anterior crisis “ya fueron un ejemplo tremendo de generación de riqueza y generación de empleo. Pasamos de ser un país que exportaba muy poco a que hoy un tercio de nuestro PIB está justificado por las exportaciones. Y eso lo han hecho los empresarios y por eso soy optimista”, reivindicó.

En cuanto a las medidas y preguntado sobre la renta mínima vital, valoró que se esté hablando de una renta “selectiva y condicional”, es decir, “un programa permanente para el sistema, pero temporal para las personas”, alertando de que “si no es temporal para las personas” los “objetivos serían perversos”.

A su juicio será, sin embargo, “complejo” en términos de definición e implementación, ya que lo que “debemos pretender es incentivar la incorporación de la gente al mercado de trabajo y mejorar su empleabilidad y no lo contrario”. “Es complejo porque debemos evitar que esto dé lugar a una economía sumergida o una generación de fraude”, agregó.

No obstante, confesó que cuenta con elementos que le dan “una cierta tranquilidad” como el hecho de que en su diseño esté el ministro José Luis Escrivá, que “es una persona que de esto conoce mucho y sabe de estas dificultades”. “Y quiero pensar que esa reevaluación constante de la que se habla sea una realidad en el futuro”, agregó.

Goirigolzarri se mostró, por otro lado, contrario a una derogación ahora de la reforma laboral. El banquero puso en valor que la reforma laboral ha ayudado precisamente a crear “más de tres millones y medio de puestos de trabajo, y creó además la figura “de la que nos estamos beneficiando de manera extraordinaria”, en alusión a los ERTE.

“Hablar de mejorar la legislación laboral por supuesto que sí. Hacer una enmienda a la totalidad de la reforma laboral me parece que no está justificado en ningún caso, pero mucho menos en un momento como este”, manifestó.

A la hora de analizar cambios potenciales en la legislación laboral indicó que habrá que tener en consideración que las condiciones del mercado de trabajo y de la economía no son las existentes antes del 2012 y “tenemos que pensar en una reforma pensando en el futuro”.

En segundo lugar, consideró además “fundamental” que cualquier cambio se realice “en el marco del diálogo social, que son los que saben. Los sindicatos y los empresarios han demostrado que tienen una enorme capacidad de llegar a acuerdos. Ellos son los que saben y ellos son los que tienen que conducir esta evolución”, indicó.