Los líderes sindicales manifestaron a Montero su temor por los efectos del teletrabajo y la necesidad de que sea regulado ya que aunque en algunos casos pueda ser una medida de conciliación, no puede suponer el incremento de horas de trabajo y la falta de desconexión, además de que, con el contexto actual, muchos padres y madres cuidan de sus hijos e hijas durante su jornada laboral en casa debido al confinamiento.

Durante la reunión también se ha tratado la preocupación por la violencia machista y, en concreto, por los casos de acoso laboral que tal y como explicaron los sindicatos “siguen existiendo durante el confinamiento”. Así, se ha convenido reforzar la formación en igualdad y violencia machista para que desde las propias organizaciones sindicales puedan ayudar y tener una respuesta para aquellas trabajadoras víctimas de acoso en el trabajo o violencia de género, según informó el Ministerio de Igualdad.