Durante la presentación de resultados anuales, Ron apuntó que las oportunidades que aprovechará la entidad son principalmente vía orgánica, es decir, a través del aumento de la propia actividad.

Pese a que no descartó tomar un papel activo en la reestructuración, Ron manifestó que "no tenemos prisa" y "habrá tiempo para encarar operaciones, siempre que generen valor y aseguren la independencia del banco".

"Estamos observando el mercado", aseveró el presidente de la entidad, quien subrayó que "hoy por hoy estamos centrados en el crecimiento orgánico y será por ahí por donde vayamos".

Ron aseguró que hasta el momento "no se nos ha ofrecido ninguna entidad" pero "todavía es prematuro y tenemos tiempo para interesarnos por las oportunidades".

El máximo directivo de la entidad financiera apuntó que el principal problema que existe es una "clara" falta de comunicación respecto a lo que está haciendo cada entidad. Y una vez que se conozcan las necesidades de recapitalización de las entidades será el momento en que el mercado lo valore en su justa medida.

Ron defendió que se pida más capital a las entidades no cotizadas que a las cotizadas, porque ya existe una asimetría entre los que ya han recibido fondos públicos y los que no lo han hecho.

OPORTUNIDADES

El presidente de la entidad financiera fue preguntado en varias ocasiones por el interés del banco en ser uno de los actores principales de la reestructuración. "Cuando tengamos la información precisa lo analizaremos y siempre y cuando la operación genere interés y asegure nuestra independencia, se estudiará".

En este sentido, afirmó que tiene cierta lógica que un banco invierta en otro banco, en referencia a la conversión iniciada por varias cajas de ahorros para ser bancos. "La fórmula de un banco para otro banco es muchísimo más fácil de entender, pero no tengo nada en contra de las cajas de ahorros", puntualizó.

Ron sí dijo que el hecho de que el Gobierno haya puesto sobre la mesa la propuesta para reforzar el capital de las cajas es positivo porque la situación "generaba desconfianza", si bien no se atrevió a precisar si los 20.000 millones que calcula el Gobierno son suficientes o no.

El presidente del banco aprovechó para señalar que las entidades que no han recibido fondos del Gobierno han tenido que capear el temporal a través de sus cuentas de resultados "y ésta es una situación que ha creado asimetría".

Para finalizar, el máximo directivo de la entidad denunció que el proceso de reorganización "ha sido en su origen lento", pero el Ejecutivo "ha acertado en introducir velocidad" a una situación que "sería conveniente que se cerrase cuanto antes".