Coronavirus

Expertos alertan sobre los factores emocionales “minimizados” de la enuresis en plena pandemia

- Alertan de que estos se unen a las consecuencias psicológicas del confinamiento

Madrid
SERVIMEDIA

El Instituto Urológico Madrileño alertó este martes sobre los factores emocionales de la enuresis o pérdida incontrolada de orina durante el sueño, “minimizados” en ocasiones por familia y algunos profesionales sanitarios y que se unen a las consecuencias psicológicas del confinamiento.

Así lo precisó este martes el director de este instituto y jefe de Urología del Hospital Santa Cristina de Madrid, el doctor Juan Carlos Ruiz de la Roja, a través de un comunicado emitido coincidiendo con el Día Mundial de la Enuresis y en el que recordó que el 16% de los niños españoles de cinco años, el 10% de los de seis años y el 7,5% de los de 10 años mojan la cama “regularmente”.

Ello supone alrededor de medio millón de menores según datos de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (Sepeap) y el problema puede persistir hasta la adolescencia y la edad adulta, según Ruiz de la Roja, que puntualizó que, en la mayoría de los casos, se trata de una afección médica “compleja”.

Suele estar causada por la excesiva producción de orina durante la noche o la capacidad reducida de la vejiga, lo que, a su vez, puede afectar a la autoestima, el bienestar emocional y el comportamiento diurno del niño.

Una encuesta realizada por expertos en 2019 reveló que la enuresis es un trastorno “poco reconocido y mal entendido” por la sociedad y los profesionales de la salud, ya que existen conceptos “erróneos” asociados a la enfermedad, como que esta tiene origen psicológico, cuando en realidad tiene una base fisiopatológica “multifactorial”.

Según la encuesta, orinarse en la cama puede conllevar sentimiento de vergüenza y baja autoestima, lo que dificulta que muchos pacientes busquen tratamiento y que este no esté optimizado por lo que Ruiz de la Roja instó a “no subestimar en ningún caso el sufrimiento de los niños enuréticos que, en muchos casos, les lleva a evitar actividades propias de su edad para que su problema no sea conocido”.

“La enuresis tiene origen fisiológico en el 90% de los casos y psicológico en tan solo un 10%, pero padecerla puede acarrear consecuencias emocionales y psicológicas al menor que no estamos contemplando en toda su magnitud”, puntualizó, convencido de que, además del “sufrimiento” que esta enfermedad supone para el niño, también hay que tener en cuenta la repercusión económica que supone a nivel familiar, con un gasto medio de unos 1.200 euros anuales.

La falta de concienciación de las familias y algunos de los profesionales sanitarios que la tratan provoca, a su juicio, que sea una patología “infra diagnosticada e infra tratada, siendo siempre los niños los que sufren las consecuencias emocionales de no tratarse tempranamente”.

“En un momento en el que los menores se han visto sometidos a confinamiento por la pandemia del coronavirus, no pudiendo interactuar con familiares y amigos y han podido sentir incertidumbre e incluso preocupación, aliviar el peso emocional que conlleva la enuresis, hablando con ellos y evitando recriminaciones o castigos, es muy importante”, sentenció.

El último martes de cada mes de mayo se celebra el Día Mundial de la Enuresis con el objetivo de concienciar a familiares y profesionales de la salud sobre el problema y las consecuencias para los menores y la iniciativa cuenta con el apoyo de Ferring Productos Farmacéuticos.

(SERVIMEDIA)
26 Mayo 2020
MJR/gja/mjg